EnglishUna investigación reveló este lunes que el Gobierno de Estados Unidos envió secretamente a jóvenes latinoamericanos a Cuba a través del programa nacional de cooperación y ayuda humanitaria USAID, con la intención de provocar cambios políticos en la isla.
La información de la agencia Associated Press (AP) resaltó que la operación clandestina colocó a los extranjeros en peligro, por ser jóvenes inexpertos, incluso después de que se condenara a un contratista estadounidense a una prisión cubana por importar material tecnológico.
La información revela que al menos en los dos últimos años, USAID, conocida por manejar el envío de miles de millones de dólares en ayuda humanitaria estadounidense a países necesitados, envió a una docena de jóvenes inexpertos de Venezuela, Costa Rica y Perú para fortalecer a la oposición política cubana.
Los viajeros trabajaron encubiertos, a veces haciéndose pasar por turistas, y viajaron por toda la isla en busca de personas que pudieran convertir en activistas políticos.
También se conoció que USAID contrató a la firma Creative Associates International, una compañía basada en Washington D.C., a provocar disenso entre los cubanos como parte de un programa cívico en un esfuerzo de Estados Unidos en contra del gobierno de Cuba. La misma empresa fue fundamental para la creación de una especie de “Twitter cubano”, una red de mensajes de texto llamada ZunZuneo que fue descubierta al público por AP en abril, y que estaba diseñada para que estuviera al alcance de cientos de miles de cubanos.
De acuerdo con documentos internos obtenidos por la AP y entrevistas realizadas en seis países distintos, los jóvenes viajeros de USAID se hicieron pasar por turistas cuando estaban en los campus universitarios cubanos y, en un caso, utilizaron como fachada un evento que podría socavar la credibilidad de USAID en sus importantes esfuerzos por prevenir enfermedades contagiosas en el mundo: montaron un taller de prevención del VIH que, según ellos, era “la excusa perfecta” para reclutar para su causa a activistas políticos, de acuerdo con un reporte hecho por el grupo. Por asumir todos esos riesgos a algunos jóvenes viajeros les pagaron hasta US$ 5 la hora.
La AP encontró que USAID y su contratista, Creative Associates International, continuaron el programa incluso cuando funcionarios estadounidenses dijeron en privado a contratistas del gobierno que consideraran suspender el viaje a Cuba luego del arresto del contratista Alan Gross, quien se mantiene en prisión después de contrabandear tecnología sensible hacia Cuba.
Fuentes: Univisión, El Nuevo Herald.