EnglishEl contratista estadounidense Alan Gross cumple este miércoles cinco años encarcelado en Cuba, en una situación que el Gobierno de Estados Unidos considera “muy decepcionante”.
Gross, de 65 años, fue detenido el 3 de diciembre de 2009 y posteriormente condenado a 15 años de cárcel por importar tecnología prohibida y tratar de establecer una red de Internet clandestina para la comunidad judía de la isla.
“Mañana (este miércoles), el trabajador para el desarrollo Alan Gross empezará su sexto año de encarcelamiento injustificado en condiciones difíciles en Cuba”, afirmó la portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Marie Harf.
La esposa del subcontratista de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) manifestó estar preocupada por la decadente salud de Gross.
“Me temo que estamos en el final. Después de cinco años consumiéndose literalmente, Alan está acabado”, dijo su esposa, Judy Gross, quien agregó que su esposo padece de depresión, cojea y ha perdido cinco dientes durante su estadía en la prisión cubana.
“Es muy decepcionante, especialmente a la luz de su declarado objetivo de proveer a los cubanos de acceso a Internet, que el Gobierno cubano no permita al señor Gross volver con su familia, a la que pertenece”, subrayó Harf.
En momentos en que sectores dentro de Estados Unidos impulsan una mejora en las relación entre ambos países, Harf explicó que el encarcelamiento de Gross “representa un impedimento significativo para una relación bilateral más constructiva” y reiteró el llamado al Gobierno de Raúl Castro a liberar a Gross “de manera inmediata”.
“Es hora de que el presidente Obama ayude al regreso de Alan a Estados Unidos ahora, de lo contrario será demasiado tarde”, agregó la esposa de Gross.
Según su abogado, Scott Gilbert, la salud física y mental de Gross se debilita rápidamente. Gilbert señaló que en los últimos 5 años Gross ha perdido más de 46 kilos, apenas puede caminar y padece de problemas de visión en su ojo derecho.