Un militar venezolano de alto rango, máximo responsable de la lucha contra el contrabando, fue al mismo tiempo uno de los principales contrabandistas de combustibles que operan entre Colombia y Venezuela, denunció el domingo 8 de febrero del diputado opositor Walter Márquez.
Márquez acusó al contraalmirante Rui Miguel de Sousa de desviar tres millones de litros de combustible a través de la frontera colombiana, donde la gasolina subsidiada venezolana puede ser vendida a un precio 70 veces mayor de su costo en Venezuela.
“A él lo habían puesto allí para controlar el contrabando y él estaba metido en el contrabando”, dijo el diputado.
Esas operaciones detectadas de contrabando fueron realizadas antes de que a De Sousa lo ascendieran.
El Gobierno de Nicolás Maduro asegura librar una guerra contra el contrabando y ha dispuesto una serie de medidas para intentar reducir la actividad ilegal en la frontera colombo-venezolana. Sin embargo, Márquez denuncia que el discurso del Gobierno no se condice con sus acciones y hace la vista gorda sobre los funcionarios involucrados en esas maniobras.
“De acuerdo con análisis hechos, el comandante entró en contacto con grupos irregulares, a quienes les vendía parte de ese cuantioso cargamento de combustible, y a pesar de que fue denunciado ante autoridades de Inteligencia (…) fue ascendido de capitán de navío a contralmirante”, afirmó el diputado.
El mes pasado, el Gobierno venezolano detuvo a de Gladys Nubia Parada, directora general de Mercado Interno del Ministerio de Petróleo y Minería, y su hermano, José Luis Parada, Director Ejecutivo de Producción de un departamento de la petrolera estatal PDVSA, por supuestas irregularidades en el despacho de combustibles.
“Ya no queda duda que el verdadero bachaqueo [contrabando] lo mantienen altos funcionarios del Gobierno”, dijo Leonardo Fernández, un concejal opositor de Maracaibo.
“Desde hace años estamos denunciando que el contrabando de extracción es manejado por quienes controlan las fronteras y los responsables de la distribución del combustible en los estados Zulia y Táchira. Es un secreto a voces que existe un grupito que se está enriqueciendo ilícitamente con el paso de grandes cantidades de gasolina al vecino país”, enfatizó.
Fuentes: El Nuevo Herald, La Nación (Venezuela).