EnglishTras una reunión celebrada en la sede del Ministerio de Transporte de Brasil, el Gobierno y representantes de camioneros alcanzaron en la noche del martes un acuerdo que podría poner fin a las protestas que lleva adelante desde hace nueve días el gremio de transporte, y que ha incluido hasta 100 bloqueos de carreteras federales en 10 Estados.
Los camioneros exigen un congelamiento de los precios del diésel, la aprobación de una ley que incrementaría la regulación del sector, facilidades para el pago de las cuotas de un plan de financiamiento estatal para la compra de camiones, y la reducción del precio de los peajes, entre otras demandas.
Según la propuesta aceptada ayer, la petrolera estatal Petrobras no aumentará el precio de la gasolina por los próximos seis meses, el Gobierno promulgará la Ley de Camioneros sin vetos, prorrogará los pagos del Programa Procaminhoneiro y mediará entre empresarios y el sindicato para acordar una tabla de referencia del valor del flete.
El anuncio del acuerdo, sin embargo, no garantiza el final de los cortes que han impedido el tránsito en las principales rutas comerciales del país. Ivan Schmidt, principal vocero del Comando Nacional del Transporte, aclaró que ellos no alcanzaron un acuerdo y rechazaron la propuesta.
“Estamos con cero ganancias, entonces el Gobierno nos propone seguir sin ganancias por más seis meses. Creo que no están bien de la cabeza. Deben tener un problema. Desafortunadamente no hemos tenido ningún acuerdo, nosotros no aceptamos ninguna propuesta”, señaló Schmidt.
Por su parte, Diumar Bueno, presidente de la Confederación Nacional de Transportistas Autónomos llamó a finalizar la huelga. “Dada la gravedad de la situación actual del país, recurrimos a la sensibilidad de los camioneros para liberar las carreteras por las conquistas que hemos conseguidos”, dijo Bueno, aunque destacó que no podía garantizar el fin de los bloqueos.
En la mañana del miércoles, algunas carreteras comenzaron a despejarse y el tránsito se normalizó, sin embargo, la cadena TV Globo informó que aún permanecían bloqueadas 27 rutas federales en cuatro Estados brasileños.
La protesta generó desabastecimiento de frutas, verduras y legumbres en algunas ciudades brasileñas e impactó en el precio de la soja que alcanzó su mayor nivel en seis semanas.
Fuente: Globo.