EnglishUn juez boliviano ordenó este miércoles 4 de marzo prisión preventiva para el exjefe antidrogas y excomandante de la Policía, Óscar Nina, su hijo Hugo y otro alto funcionario policial, luego de que testificarán durante 11 horas sin poder justificar el origen de los bienes que poseen, informó la fiscal anticorrupción Ana Luis Heredia.
“Ellos no justifican los bienes que tienen con sus salarios… por eso estamos solicitando la detención preventiva”, explicó Heredia.
Las autoridades están investigando a Nina, junto con otras seis personas, por enriquecimiento ilícito, lavado de dinero, y vínculos con el narcotráfico.
El juez también ordenó el arresto de la esposa e hija de Nina, aunque fueron liberadas bajo una fianza de 20.000 Bol. (US$2.900) y quedaron bajo arresto domiciliario.
El ministro de Gobierno, Hugo Moldiz, señalo que hay “serias sospechas” sobre los vínculos de Nina con narcotraficantes. “Creemos que se ha dado un buen primer paso y le corresponde hoy a la Justicia acelerar la resolución de este caso para sentar un precedente”, declaró el miércoles luego de una reunión de gabinete.
El presidente boliviano, Evo Morales, designó a Nina en 2008 como jefe antidrogas tras la expulsión de la Adminsitración para el Control de las Drogas estadounidense (DEA) en 2008.
En 2010, fue asignado como jefe de la policía, cargo que ostentó hasta 2011, cuando se retiró tras un escándalo que involucraba con el tráfico de drogas al general René Sanabria, en ese momento, máxima autoridad en la guerra contra las drogas en el país.
Nina es el segundo jefe antidrogas en ser juzgado por su relación con narcotraficantes. En febrero de 2011, agentes antinarcoticos estadounidenses detuvieron a Sanabria, y un año más tarde un juez estadounidense lo sentenció a 14 años de prisión por participar en el envío de un cargamento de 144 kilogramos de cocaína desde Bolivia a Miami, Florida. Sanabria se encuentra cumpliendo la sentencia en una cárcel en Estados Unidos.
Bolivia es el mayor productor mundial de cocaína después de Perú y Colombia, y el principal proveedor de la droga para los países sudamericanos, de acuerdo con datos de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito.