En los tres primeros meses del 2015, un total de 9.371 inmigrantes cubanos llegaron a Estados Unidos, la mayoría a Miami. Ello representa un aumento del 118% en la cantidad de cubanos llegados a costas norteamericanas, con respecto al primer trimestre del año 2014, informó la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza estadounidense.
El agudo incremento obedece a la incertidumbre en torno a las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, desde que el pasado 17 de diciembre Barack Obama anunció una cambio en la política estadounidense hacia la isla.
El temor es puntualmente por posibles cambios en la Ley de Ajuste Cubano, de 1966, mediante la cual los refugiados cubanos que llegan a suelo estadounidense pueden permanecer en el país y están autorizados a solicitar la residencia.
“Los cubanos en la isla están cada vez más preocupados de que el estatuto jurídico especial que tienen bajo la ley actual de Estados Unidos sea eliminado”, aseguró Jorge Duany, director del Instituto de Investigaciones Cubanas de la Universidad Internacional de La Florida.
El Gobierno de Obama ha intentado disipar cualquier rumor sobre una eventual modificación en esta regulación que favorece a los cubanos.
“En relación con el reciente anuncio de la Administración de Cuba, no se ha cambiado o alterado de manera significativa la Ley de Ajuste Cubano de Refugiados”, expresaron las autoridades estadounidenses.
Desde Miami, Iris Calle, vocera de la Iglesia de los Servicios Mundiales en Miami, que brinda asistencia a los recién llegados, menciona que el centro de refugiados se ha visto inundado de inmigrantes cubanos desde mediados de diciembre del año pasado.
Como el caso de Lady Castillo Miranda, quien arribó a EE.UU. el 28 de diciembre, luego de dos intentos fallidos en los últimos años. “Tenía que cruzar de nuevo porque escuché que la ley iba a cambiar”, dijo a Reuters.