Por rociar con gasolina y quemar a dos jóvenes en 1986, durante la dictadura de Augusto Pinochet, la justicia chilena encarceló este lunes a cuatro exmilitares.
La orden de detención, que involucra a exoficiales y suboficiales del Ejército, fue emitida por el juez Mario Carroza, quien despachó este lunes cinco órdenes de detención.
El hecho permaneció bajo la sombra durante casi tres décadas, hasta que un exrecluta rompió silencio y realizó un crudo relato de los acontecimientos.
Entre los nuevos detenidos está Pedro Fernández Dittus, el oficial al mando de la patrulla que agredió a los jóvenes en un barrio de Santiago, y quien ordenó después llevarlos hasta un camino rural en las afueras de la ciudad, para incinerarlos. Junto con él, fueron detenidos Leonardo Riquelme, Juan González y Walter Lara.
El pasado viernes fueron procesados como autores los exoficiales en retiro Julio Castañer, por prender fuego a los jóvenes; e Iván Figueroa, y los suboficiales en retiro Luis Zúñiga, Francisco Vásquez, Nelson Medina y Jorge Astengo, mientras que Sergio Hernández fue acusado como cómplice.
En medio de una extensa jornada de protesta contra la dictadura de Pinochet, el fotógrafo Rodrigo Rojas de Negri, de 19 años, y la entonces estudiante de ingeniería, Carmen Gloria Quintana, de 18 años, fueron detenidos por tres patrullas militares. Después de ser golpeados y reducidos en el suelo, fueron rociados con gasolina y les prendieron fuego.
Rojas murió después de cuatro días de agonía, mientras que Carmen Gloria se recuperó tras resultar con más de 60% de su cuerpo quemado.