Tras nueve años ininterrumpidos al frente de la presidencia de Bolivia, Evo Morales se prepara para mandar, al menos, durante otros quince años, pues el Congreso de Bolivia, controlado por su partido, el Movimiento al Socialismo, aprobó una convocatoria a referendo de reforma constitucional, que le permitirá postularse para el período 2015-2020, luego para el 2020-25 y luego para el 2025-30.
El referendo, que se realizará el 21 de febrero de 2016, preguntará a los bolivianos: “¿Usted está de acuerdo con la reforma del artículo 168 de la Constitución Política del Estado para que la Presidenta o Presidente y la Vicepresidenta o Vicepresidente del Estado puedan ser reelectas o reelectos por dos veces de manera continua?”.
Pero junto con la pregunta viene en una disposición transitoria, que establece que el “primer período” de Morales en la presidencia bajo la reforma de la Constitución es el que ganó este año y por el cual también gobernará hasta 2020. En principio, se estimaba que la reforma le permitiría reelegirse solo para el período 2020-25.
Dos tercios de las cámaras de Diputados y Senadores aprobaron la fecha y la convocatoria luego de una maratónica sesión de 18 horas.
Morales ya reformó la Constitución en 2009, cuando llevaba tres años en el poder, y se usó el mismo subterfugio para permitirle la reelección en 2015: Que su victoria en 2010 era la primera bajo la nueva Constitución.
Similar mecanismo usó en Venezuela Hugo Chávez, en 2000, y también el de la reforma constitucional que le permitió la reelección indefinida; y aunque venció en las elecciones de 2012, gravemente enfermo de cáncer, no pudo asumir la presidencia para su cuarto período y finalmente murió en marzo de 2013.
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“El Gobierno no está cumpliendo la Constitución, está cambiando las reglas de juego cada cinco años, para permitir una nueva reelección, porque esta es la tercera reelección”, protestó el senador opositor Oscar Ortiz.
Sin embargo, se estima que la oposición está dispersa y sin liderazgo, y no podrá impedir que Morales imponga su voluntad; aunque un sondeo reciente mostraba que 54% de los bolivianos no estaban dispuestos a concederle más tiempo a Morales, esa cifra era cuatro puntos inferior a la de sondeos realizados cuando desde el movimiento político del mandatario se comenzó a acariciar la idea de volver a reformar la Constitución para mantenerlo en el poder.
Fuente: Andina Agencia de Noticias.