El Gobierno boliviano denunció el pasado martes, 18 de noviembre, a Chile por el incumplimiento del Tratado de Ottawa, según el cual debía desactivar todas las minas antipersonales sembradas en zonas de su frontera con Bolivia antes de 2012.
El ministro de Defensa, Reymi Ferreiera, informó que el gobierno chileno “no dio ninguna explicación” y anunció que Discovery Channel está realizando un documental para evidenciar este problema.
Reymi Ferreira manifestó que, “una cuarta parte de lo que se tenía que hacer (del desminado), aparentemente Chile lo había cumplido, pero el compromiso hasta el 2012 era (desactivar) la totalidad (de minas), no una parte”.
“No se ha cumplido, lamentablemente Chile no ha desactivado (las minas). Hay campos minados no desactivados en la frontera cercana a los departamentos (bolivianos) de Potosí y Oruro”, agrega Ferreira.
Según el ministro, esta situación “pone en riesgo la vida de las personas, el medio ambiente y los animales”, y afirmó que se desconoce la cantidad de minas antipersonales que quedan por desactivar.
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“Nosotros como ministerio vamos a apoyar para que lleguen al último rincón” (refiriéndose al documental que hará la televisora), indicó Ferreira, y sentenció que el programa “va a servir para mostrar a la comunidad internacional que Chile incumple el Tratado de Ottawa”.
La Convención sobre la Prohibición del Empleo, Almacenamiento, Producción y Transferencia de Minas Antipersona y sobre su destrucción, conocida como Tratado de Ottawa, se firmó en diciembre de 1997 por 122 Estados y se oficializó en marzo de 1999.
“Cada Estado parte se compromete a destruir, o a asegurar la destrucción de todas las minas antipersonales colocadas en los zonas minadas que estén bajo su jurisdicción o control, lo antes posible, y a más tardar en un plazo de 10 años (2012), a partir de la entrada en vigor de esta Convención para ese Estado parte”, menciona el tratado.
Sin embargo, el Gobierno que preside Michelle Bachellet expresó su compromiso de retirar las minas antipersonales antes de 2020, tras obtener una prórroga por parte de los Estados miembros de la Convención de Ottawa, la cual no ha sido reconocida por Bolivia.
Fuentes: Los Tiempos, La Razón.