Una sobrefacturación superior a 300% fue descubierta en al menos uno de los viajes que la expresidenta argentina, Cristina Kirchner, realizó al exterior durante su mandato. Un viaje a Paraguay, con una comitiva para una reunión relámpago con el papa Francisco, terminó con facturas adulteradas, mediante las cuales, un costo de US$25.503,80 dólares en la factura original de alojamiento (en los hoteles Bourbon y Guaraní Esplendor, dos de los mejores de Asunción) terminó siendo de US$92.225.
En tanto, los traslados también fueron adulterados, y gastos de solo US$9.590 fueron convertidos en una factura, con comprobantes adicionales, de más de $63 mil, un sobreprecio de 70%.
Pero este no es el único gasto “inflado” que ha descubierto la Secretaría General de la Presidencia de la República Argentina, que dirige Fernando De Andreis. Dos semanas después de ese viaje, que se realizó en julio, la presidenta Kirchner viajó a la Asamblea General de las Naciones Unidas, en Nueva York, Estados Unidos.
Para ese viaje, la Secretaría General descubrió facturas adulteradas, cuya diferencia debe haberse quedado algún miembro de la comitiva K, por US$201 mil en gastos de viaje y representación; las facturas originales, por $183 mil, terminaron siendo de $385 mil.
Hasta ahora, se ha realizado auditoría solo a los gastos realizados entre el 1 de julio y el 9 de diciembre del año pasado; pueden ser “la punta de un largo ovillo”, señalaron fuentes de la Secretaría General de la Presidencia a Clarín.
La investigación surgió de las denuncias de personal de la propia Casa Rosada, que cuando llegó a la presidencia Mauricio Macri advirtieron a la nueva administración de “facturaciones truchas”. Pero ahora, ante los hallazgos encontrados, la pesquisa se extenderá mucho más allá de los últimos seis meses de administración K.
Fuente: Clarín.