El Gobierno de Mauricio Macri está realizando todas las gestiones para frenar la aprobación en la Cámara de Senado argentino de la ley que intenta frenar los despidos y establecer la doble indemnización.
Macri rechaza los proyectos de ley propuestos por la oposición en el Congreso porque, a su juicio, terminarán perjudicando el trabajo en el país. “No tenemos que repetir los errores. Ya probamos en 2002 con leyes que prohibían, eso no trajo más trabajo, destruyó el trabajo”, advirtió Macri la semana pasada.
En un intento por frenar la iniciativa el mandatario nacional anunció este lunes que presentará ante el Congreso la ley del primer empleo, que tiene como objetivo aumentar las posibilidades a jóvenes entre 18 y 24 años de insertarse en el mundo laboral. La ley incluye exenciones y subsidios a las empresas que incorporen jóvenes a sus nóminas.
El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, ha contactado a casi todos los gobernadores de las provincias argentinas para que convenzan a los legisladores de sus zonas de rechazar la aprobación de la ley, y de esta forma, lograr el bloqueo de la iniciativa. El Gobierno tendrá que dividir al bloque kirchnerista Frente para la Victoria, tal como lo hizo para lograr la aprobación del pago a los fondos buitre.
Ya en la Cámara de Diputados el opositor Frente Renovador no presentará su propuesta antidespidos a partir del compromiso del oficialismo de incluir en la agenda una propuesta alternativa.
El líder de este bloque, el diputado nacional Sergio Massa, aclaró que la iniciativa que surgió entre los diputados opositores de avanzar con una “prohibición de despidos a las grandes empresas” buscó “ser un límite pero también una señal clara de protección, de que estamos dispuestos a cuidar a los que tienen trabajo”.
“Los aumentos de precios y de tarifas, no sólo complican al trabajador y su familia sino también al pequeño y mediano comerciante o empresario, que hoy paga hasta seis veces más de luz”, enfatizó Massa.
Al Ejecutivo le queda la potestad de vetar el proyecto si llegara a aprobarse, pero el oficialismo se muestra optimista sobre la posibilidad de que la ley no prospere en le Cámara Alta este jueves.
Fuentes consultadas por Clarín señalan por qué los gobernadores apoyarán al Gobierno: “Entienden que es un proyecto inviable para nuestro plan económico y saben que la ley no va a salir: ¿cuántos se van a arriesgar a no frenar a sus senadores y diputados? ¿Con qué cara pueden venir a pedir algo si están ayudando a frenar el ingreso de inversiones?”.
Trascendió que el bloque kirchnerista Frente Para la Victoria (FPV) podría dejar a un lado la ley antidespidos si el Gobierno convoca a una mesa de diálogo social, dijo Clarín.
Hasta ahora se conoce que el proyecto de la Cámara Alta declara nulos los despidos por 180 días a partir de la entrada en vigencia de la ley y propone la reincorporación del empleado a despedir o el pago de doble indemnización.
Por su parte, la iniciativa de la Cámara de Diputados propone que la ley antidespidos sea retroactiva al 1° de marzo, declara la emergencia ocupacional hasta el final de 2017, lo que prohíbe despidos sin justa causa en el sector público y en el privado
El ministro de Trabajo, Jorge Triaca, también había mostrado su inconformidad con las iniciativas del Congreso. “Los proyectos que están presentándose en el Senado y en Diputados no ayudan en este momento a mejorar la empleabilidad de la gente”, señaló.
Por su parte, las cinco centrales sindicales del Argentina se preparan para este viernes, cuando realizarán una concentración masiva con motivo del 1º de mayo, en la que aprovecharán para mostrar su adhesión a una ley antidespidos, el reclamo por el impuesto a las ganancias, la inflación y otros temas con los que no están de acuerdo en la conducción económica del gobierno.
Pero no todos van en la misma línea. Gerónimo Venegas, titular de 62 Organizaciones, mostró su desacuerdo con la ley por considerar que no ha dado resultados positivos en el pasado. “Tenemos que cuidar el trabajo, esto ha fracasado antes. Hay empresas que no quieren despedir pero si saben que tienen que pagar doble indemnización dentro de un mes o veinte días van a despedir gente”, dijo Venegas a AM 950 Belgrano.
“Hay otros sindicalistas a los que no les gusta la ley antidespidos y es un análisis muy profundo que tenemos que hacer los dirigentes gremiales. Es una discusión que se tiene que dar en el seno de la CGT”, agregó.
La ley antidespidos pone a prueba nuevamente al Gobierno de Macri en su capacidad de negociación y consenso.
Fuente: Clarín.