La Conferencia Episcopal Argentina (CEA) y el Vaticano anunciaron este martes que ponen a disposición de víctimas y familiares de desaparecidos durante la última dictadura militar (1976-1983) los archivos que la Iglesia conserva de ese período.
El proceso de catalogación, organización y digitalización de los archivos fue ordenado por el papa Francisco en marzo de este año, en el marco del 40 aniversario del golpe de Estado de 1976.
Entre la documentación que se dará a conocer, se encuentran cartas en las que se solicitaba información sobre el paradero de detenidos desaparecidos y recortes de periódicos de la época.
Según un comunicado de prensa conjunto de la Secretaría de Estado y la Conferencia Episcopal Argentina, difundido simultáneamente en Buenos Aires y Roma, a los documentos podrán acceder las víctimas y familiares directos de los desaparecidos y detenidos. En el caso de religiosos o eclesiásticos podrán hacer consultas sus Superiores mayores.
“Este trabajo se ha desarrollado teniendo como premisa el servicio a la verdad, a la justicia y a la paz, continuando el diálogo abierto a la cultura del encuentro “, dice el comunicado.
La decisión de facilitar los archivos eclesiásticos de la dictadura militar se acordó el pasado de 15 de octubre, tras la reunión que la mesa ejecutiva de la CEA tuvo en el Vaticano con el cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado del pontífice, el monseñor Richard Paul Gallagher, secretario para las Relaciones con los Estados, y oficiales de la Secretaría de Estado vaticano.
El papa había prometido a la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, la activista y madre de desaparecido, Estela de Carlotto, avanzar en la desclasificación de los documentos. Carloto pidió a Francisco que abriera los archivos para colaborar en la búsqueda de nietos robados, a fin de que recuperen su identidad.