El pasado 12 de febrero entró en vigencia en Venezuela el nuevo Sistema Marginal de Divisas (Simadi), de acuerdo al Convenio Cambiario N° 33 publicado en la Gaceta Oficial Extraordinaria N° 6.171. Este nuevo sistema cambiario abrió ese jueves a una tasa de Bs. 170,03 por dólar, según lo informó el Banco Central de Venezuela (BCV).
A esto se le suma el hecho de que el Simadi ya experimentó su primera alza en el valor de la divisa, ya que el BCV anunció al día siguiente su cierre en Bs. 174,46. Esto representó un aumento del 2,6% en comparación al día anterior al que la medida fue puesta en vigencia, constituyendo de esta forma un precio que se acerca aún más al costo del dólar en Venezuela, expresado por el sistema cambiario paralelo.
Estas cifras se diferencian notablemente de las establecidas para el Cencoex y el Sicad, establecidas en Bs. 6,30 y Bs. 12 respectivamente.

José Guerra, economista, profesor universitario y ex director de la Escuela de Economía de la Universidad Central de Venezuela, declaró que el Simadi es un “sistema de cambio paralelo manejado por el Gobierno”. Asimismo señaló que representa una “macrodevaluación del bolívar“.
El presidente del Banco Central de Venezuela, Nelson Merentes, había señalado con anterioridad que el precio se colocaría en niveles similares al dólar paralelo; lo que implicaría una legalización del mismo, según Guerra.
Distorsión de precios/cambiaria, expropiaciones y el Plan Socialista, con fin social, causaron un gran fracaso económico. Empobrecen a Vzla
— Orlando Ochoa P. (@OrlandoOchoa) February 14, 2015
El ministro para Economía, Finanzas y Banca Pública, Rodolfo Marco Torres, garantizó la obtención de materia prima para los sectores que lo ameriten, a la vez que expresó que no debería existir ningún tipo de especulación con este sistema.
El monto con el que empezó Simadi fue declarado como un “error histórico” de acuerdo con Darwin Alvarado, jefe del departamento de Microeconomía Aplicada de la Escuela de Economía de la Universidad de Carabobo, quien además aseguró que las empresas “se ven obligadas a utilizar este nuevo sistema cambiario debido a que por medio del Sicad no reciben la cantidad suficiente de divisas”.
El panorama ante el mercado cambiario alternativo
Alvarado señaló que, si el Gobierno en algún momento no satisface adecuadamente la demanda de divisas, podría traer como consecuencia un aumento del costo manejado para el dólar paralelo, “generando así una situación mucho más catastrófica para todos los venezolanos”.
Luis Vicente León, economista y presidente de Datanálisis, indicó que el Simadi abriría la posibilidad al mercado alternativo de aumentar su participación, ya que el nuevo sistema cambiario propuesto por el Gobierno plantea una serie de restricciones que obstaculizan la obtención de las divisas, tanto a nivel burocrático como en el límite máximo que se puede adquirir al mes y anualmente.
El gran cambio en los anuncios cambiarios es la apertura del mercado paralelo, que el gobierno llama marginal…y debió ser principal
— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) February 10, 2015
“Yo creo que el mercado paralelo va a seguir existiendo porque no creo que el BCV tenga con qué ofrecer dólares suficientes”, afirmó el economista Guerra, quien añade que el Simadi ayudaría a mejorar la situación de los importadores solo si estos reciben una cantidad suficiente de divisas, lo cual no se podría con los precios que se manejan, “porque no es lo mismo importar a Bs. 6,30 por dólar que a Bs. 177”, “Hablemos claro, el Simadi es para sacar capitales, principalmente”. Luis Vicente León expresó además que el elevado nivel de demanda y la escasa oferta de divisas perjudicará aún más las importaciones de materia prima y productos terminados.
“Sería pertinente que el Gobierno explique con cuáles dólares se cubrirán las importaciones a tasas de Bs. 6,30 y Bs. 12, si los ingresos petroleros están cayendo en más del 50%”, indicó el economista, quien concluye que a pesar de todo “aún es pronto para hacer valoraciones” con respecto al mercado, pero añadió que estas medidas no evitarán que haya inflación en el país.
Por su parte, Alicia Bárcena, titular de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), declaró el pasado viernes 13 que el Simadi “va en la dirección correcta”. No obstante, también dijo que falta ver los desafíos que planteará, a lo cual añade que mantener tres tipos diferentes de control cambiario no es lo indicado y además resulta complejo.
José Guerra concuerda y expresa que lo ideal es que haya un solo sistema unificado. Venezuela cuenta con tres tasas oficiales de control cambiario desde que empezara a implementar estas medidas en el año 2003. El año pasado las cifras económicas cerraron marcando un 64% de inflación en el país.