EnglishEste martes 16 de diciembre se dio un enfrentamiento entre milicias de autodefensa rivales en La Ruana, a 550 km de la Ciudad de México. El choque entre los grupos armados dejó 11 muertos, entre ellos el hijo de Hipólito Mora, impulsor de las primeras autodefensas contra el narcotráfico.
“Ellos no se preocupan por nosotros”
“Mi hijo está muerto, junto con otros cuatro o cinco”, dijo Hipólito Mora en una entrevista telefónica momentos después del tiroteo.
Mora, un exagricultor de limón, dijo con ansiedad a la AFP que él informó a las autoridades en varias ocasiones que un grupo liderado por Antonio Torres González, conocido como “El Americano“, estaba planeando atacar a La Ruana, pero fue ignorado.
Mora denunció que el responsable de lo sucedido es Alfredo Castillo Cervantes, Comisionado Especial del Gobierno Federal para Michoacán. “Castillo ya sabía de todo esto, yo se lo advertí”.
Agregó que los hombres de Torres superaron a su grupo, y que las fuerzas de la policía federal los habían abandonado. “Si me llamas de nuevo, es muy posible que ya no pueda responder porque ellos vienen a matarnos a todos. Hay solo unos pocos de nosotros aquí, pero vamos a luchar hasta la muerte”.
Mora llamó a “todos los mexicanos”: “¡Defiéndanse, luchen por sus derechos! No crean en el Gobierno… engaña a la gente y no se preocupa por nosotros”.
Por su parte, Jorge Vásquez, vocero de la autodefensa de Michoacán, explicó a la emisora local CB Televisión que la Gendarmería Nacional y la policía estaban presente en La Ruana, pero “huyeron” en el momento que comenzó la confrontación.”El problema es que las fuerzas federales se retiraron con el fin de dejar que se maten entre ellos”, dijo.
Vásquez también indicó que diferentes grupos de zonas cercanas se han empezado a movilizar, preparándose para defenderse en caso de nuevos ataques, debido a que afirmó que las fuerzas gubernamentales “no existen” en la zona.
http://youtu.be/3TJe4HwwBeQ
“Seguimos en la misma situación que siempre hemos estado, es como si el Gobierno no existiese, es como si el comisionado Castillo fuese solo una postal pegada en la pared”, afirmó. “Si todavía vivimos en un país donde existen leyes, su obligación es estar ahí, no correr como ratas cobardes”.
No más mártires
Castillo Cervantes confirmó en una rueda de prensa que de las 11 personas que murieron, cinco eran del grupo de Mora y los seis restantes eran parte de la milicia de Torres. También declaró que cualquier persona que haya formado parte de este conflicto armado “estará sujeto a toda la fuerza de la ley”, incluidos Mora y El Americano.
“Lamentamos lo que pasó, pero es esencial no martirizar a nadie. Tenemos que esperar el resultado de las investigaciones en curso”, dijo Castillo.
Por otra parte, afirmó que el Gobierno mexicano no permitirá a los grupos de autodefensa que vuelvan a tomar las armas y arrestarán a quienes lo hagan.
https://twitter.com/Comisionadomich/status/545223344690565120
Los grupos de autodefensa son milicias ciudadanas que surgieron en Michoacán en 2013 para defender a sus pueblos del cártel de la droga Caballeros Templarios. Se basan en el fracaso del Gobierno mexicano en garantizar la seguridad como la razón de su existencia.
En mayo pasado, el Gobierno de México llegó a un acuerdo con los dirigentes de algunos de los grupos de autodefensa para registrar sus armas y unirse para formar una policía rural oficial. En agosto, las autoridades mexicanas suspendieron temporalmente a Antonio Torres como comandante de la Policía Rural, después de un video sobre una reunión que surgió entre El Americano y el líder de los Caballeros Templarios, Servando “La Tuta” Gómez.
El Fiscal General de Michoacán, José Martín Godoy Castro, regresó a Torres a su cargo, luego de alegar que la controversia sobre el video era un caso de equivocación de identidad.
Este último incidente de violencia pone en manifiesto, la situación crítica que enfrenta México desde la desaparición forzada de los 43 estudiantes de Ayotzinapa en Guerrero, y la demanda de la opinión pública para poner fin a las disputas entre carteles de la droga y el Gobierno.
Se cree que los miembros de la banda de narcotraficantes Guerreros Unidos, asesinaron a los estudiantes desaparecidos bajo las órdenes del Gobierno Municipal de Iguala.
Con la contribución de Guillermo Jimenez. Traducido por Sabrina Martín.