EnglishNelson Serrano es el primer y único ciudadano ecuatoriano condenado a pena de muerte en Estados Unidos. Sin embargo, luego de nueve años de investigación, la periodista Janet Hinostroza demuestra que las inconsistencias y la corrupción no son ajenos a un sistema de justicia considerado como ejemplar, en su nuevo documental titulado Nelson Serrano – Soy Inocente.
Serrano, un exempresario ecuatoriano y ciudadano estadounidense, fue condenado en 1997 por el asesinato de Frank Dosso, Diane Patisso, George Patisso y George Gonsalves en la ciudad de Bartow, Florida. En el 2006 fue condenado a pena de muerte, y su sentencia fue ratificada el año siguiente.
En una entrevista con PanAm Post, la periodista con más de 20 años de experiencia contó los detalles sobre este proyecto, con el que inicia una nueva etapa de su carrera.
El documental presenta una combinación de investigación periodística y policial; retrata la vida en la cárcel de Nelson Serrano, y la lucha de sus familiares por demostrar su inocencia. Se estrenó en televisión nacional el pasado 13 de abril, y estará disponible en Internet luego de ser presentado en festivales internacionales de derechos humanos.
¿Como se involucró con el caso del señor Serrano?
Es una investigación que he venido siguiendo por nueve años. Me llamó la atención por tratarse del primer ecuatoriano condenado a pena de muerte. En Ecuador no existe esta pena, por lo que es un caso único.
Al investigar un poco sobre cómo y por qué había sido condenado, me fui encontrando con varias inconsistencias. Nelson Serrano fue condenado a cuatro penas de muerte, como autor material de esas muertes, pero no se encontró ni una sola prueba de que él estuvo en el lugar de los hechos. No hubo ni una huella digital, ni un cabello, ni un testigo que lo haya visto, nada.
Entonces mi pregunta era: ¿cómo te condenan a autor material si no has estado ahi? Durante los últimos años he ido reportando los acontecimientos en torno a este caso, hasta que, con todo el material que tenía, decidí hacer un gran documental que lo resuma todo.
¿Cómo ha sido para usted la experiencia de realizar un documental?
Ha sido un sueño cumplido. Trabajamos con un equipo de profesionales pequeño pero brillante. Logramos un video con una historia muy atractiva, que atrapa al televidente y lo mantiene pendiente de principio a fin, que era lo que queríamos. Quisimos darle ese toque de misterio, de tensión, y tuvo un resultado extraordinario. Es una producción de mucha calidad que nos dejó muy satisfechos.
¿Por qué tantos abusos contra el señor Serrano? Él menciona que fue torturado por 200 días, por ejemplo.
El sistema de justicia estadounidense es bueno, pero al estar hecho por seres humanos, se cometen errores. Hay intereses y corrupción, como en todos los sistemas judiciales del mundo. Lo que pasa es que este sistema ha proyectado una imagen de mucho éxito, de respeto hacia las instancias, que nos hace difícil creer que se puedan cometer errores; mucho menos si a esta persona, además de todo, le van a quitar la vida.
Pero estas cosas suceden. En EE.UU. hay más de 1,200 personas que han logrado salir del “corredor de la muerte”, y después de años de estar en la cárcel han podido demostrar su inocencia. Él [Serrano] es una víctima más. Es el típico caso de la persona que terminó involucrada por estar ahí en el momento menos indicado.
En EE.UU. la justicia también se mueve por intereses. Los fiscales son elegidos por votación, y el mejor, es el que más ejecuciones tiene en su historial. Eso los hace ver como héroes, como gente que lucha contra la inseguridad por el bienestar de la sociedad. Es un factor muy peligroso, no sabemos cuántos inocentes habrán muerto sin haber podido demostrar su inocencia.
¿Cómo ha sido la respuesta del público? Sabemos que fueron tendencia en Twitter.
Estamos muy contentos. Hubo mucha expectativa en torno al documental, tuvimos muy buen rating en la televisión; y en redes sociales fuimos tendencia en Ecuador.
Lo que más me ha gustado es que mucha gente quiere ayudar, y eso me encanta porque parte de los objetivos del documental era remover la conciencia de la gente, no solamente a favor de Nelson Serrano, sino en contra de la pena de muerte.
Este caso me sacudió mucho y me demostró que la pena de muerte es una instancia muy peligrosa. Aquí en Ecuador la gente la pide mucho, porque claro, es doloroso que a un ser querido lo violen o le hagan daño. Pero si en EE.UU. ocurren cosas como esta, donde una persona inocente posiblemente sea ejecutada, ¿qué podría pasar en un sistema tan imperfecto como el nuestro?
En Ecuador la justicia realmente tiene un precio muy alto, y los pobres no tienen ningún tipo de acceso a ella, entonces yo creo que es muy peligroso. Correríamos el riesgo de cometer muchas injusticias solo porque alguien pague un delito.
¿Qué piensa de que el presidente Correa califique a la prensa como “mala” o “buena”, según sus declaraciones en la VII Cumbre de las Américas?
Este documental es una muestra de que en Latinoamérica y en Ecuador hay buena prensa, que somos muy profesionales y que podemos ser muy objetivos. En el documental reconozco como se debe el trabajo que el gobierno de Rafael Correa ha hecho en el caso de Nelson Serrano, y no tengo ningún problema en decirlo, pues es lo profesional y lo correcto.
Con qué criterio califica qué es buena prensa y mala prensa. ¿Quién califica eso? ¿Él? Es lo menos objetivo que he podido escuchar. Si la prensa que él critica es la mala, me imagino que la prensa que él secuestra es la buena. Tiene un montón de medios en el país que trabajan para el gobierno, bajo sus ordenes; que hacen propaganda, no periodismo.
Correa no debe generalizar ni puede decir que hay una prensa buena y una mala y calificarla de acuerdo a un criterio completamente sesgado. Según él, quien le hace propaganda y lo aplaude es buena prensa; y quien se atreve a criticarlo o develar cualquier acto de corrupción de su gobierno es mala.
Con la contribución de Sabrina Martin.