EnglishHuman Rights Watch (HRW) responsabilizó al Gobierno de Venezuela por la crisis sanitaria del país suramericano, en el cual, según esta ONG, miles de pacientes han dejado de recibir sus tratamientos por la escasez de medicinas, la cual causa una larga lista de espera, incluso para casos de vida o muerte.
Tras una investigación de varios meses, la Organización No Gubernamental afirmó que el régimen encabezado por Nicolás Maduro ha buscado evadir el problema, culpando a médicos y farmacias por la falta de insumos en el país, pero HRW asegura que “en realidad la crisis es responsabilidad del propio Gobierno”.
El director Ejecutivo para las Américas de HRW, Jose Miguel Vivanco, afirmó que “pocas veces hemos visto, fuera de zonas en guerra, un deterioro tan rápido en el acceso a medicamentos esenciales como en Venezuela”; dijo que las políticas públicas implementadas por el Ejecutivo han causado la escasez, y que la vida y salud de decenas de miles de personas están en riesgo en el país.
El documento emitido por HRW hace referencia a la encuesta realizada por Médicos por la Salud, la cual reveló que de 130 hospitales estudiados en Venezuela, 44% no cuentan con quirófanos operativos. Además, la misma encuesta reflejó que 60% de los medicamentos catalogados como esenciales por la Organización Mundial de la Salud no están disponibles en las farmacias.
El pasado 17 de marzo, organizaciones de derechos humanos de Venezuela denunciaron ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) una crisis sanitaria en el país originada por la escasez de insumos y medicamentos y el mal estado de las instalaciones hospitalarias.
“No se ofrecen a la población las garantías mínimas de atención a la salud”, dijo Luisa Rodríguez, presidenta de Funcamama; y Feliciano Reyna, de Acción Solidaria en VIH/Sida se refirió al “deterioro severo de infraestructuras” debido a inundaciones, suspensiones del servicio eléctrico y de agua, hacinamiento, contaminación y la reducción en las camas operativas.
Racionamiento tecnológico de medicinas
Ante la escasez de medicinas presente en el país, de 60% en la capital venezolana y 70% en el interior, el Gobierno decidió crear un sistema digital de acceso a medicinas, para el que tendrán prioridad los pacientes de enfermedades crónicas.
El ministro para la Salud, Henry Ventura, informó el pasado jueves 23 de abril que el Sistema Integrado de Acceso a Medicamentos (Siamed), consiste en obtener medicinas específicas a través de Internet. De acuerdo con el titular del ministerio, la plataforma permitirá a los pacientes registrados conocer el momento de llegada de los medicamentos a las farmacias y retirarlos de “manera oportuna y equitativa”.
Ventura informó en la primera fase del Siamed se suministrará con prioridad los medicamentos para tratar enfermedades cardiovasculares, endocrinometabólicas y neurológicas.
Pero ante esta decisión gubernamental, Freddy Ceballos, presidente de la Federación Farmacéutica de Venezuela (Fefarven) aseguró que los niveles de abastecimiento de medicamentos en el país no son suficientes para atender la demanda del nuevo sistema; “A los pacientes que se vayan a inscribir ¿qué les van a distribuir, si no hay medicamentos?”, se preguntó.
De acuerdo con el representante del gremio farmacéutico, el Siamed “no estaría atacando el problema base”, que según Ceballos, es la falta de asignación de divisas para adquirir los medicamentos y distribuirlos por el país.
Sin divisas no hay medicamentos
El informe de Human Rights Watch mencionó la necesidad de cambiar la política monetaria y el control cambiario establecido por el Gobierno de Venezuela, debido a que la escasez de divisas no permite al sector salud cancelar su deuda en el exterior.
HRW asegura que como Venezuela no cuenta con una industria farmacéutica fuerte, debe importar la mayoría de los medicamentos, insumos y la materia prima, lo que hace imperante que el Gobierno adjudique las divisas.
Por su parte, Ceballos denunció que si no hay entrega de divisas no habrá producción de medicamentos para atender la demanda nacional. Aseveró que “mientras el Gobierno no liquide los dólares necesarios de manera planificada, programada y sistemática, continuarán los mismos problemas”.
Y es que en Venezuela, la crisis en el sector médico se refleja con la emigración de hasta trece mil profesionales de la salud, que buscaron mejorar su calidad laboral y de vida fuera de su país.
Editado por Pedro García Otero.