
La falta de respuesta de las autoridades, la escasez de alimentos y los altos costos de los mismos, derivaron en un estallido de desesperación por parte de los indígenas venezolanos que están ubicados en la frontera colombo-venezolana. Así lo informó a PanAm Post, el doctor Virgilio Ferrer, candidato indígena por la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en el circuito que comprende los estados Zulia, Mérida y Trujillo.
El pasado martes 4 de agosto, ciudadanos de la etnia Wayúu, en la parroquia Sinamaica del municipio Guajira en el estado Zulia, exigieron la venta inmediata de alimentos luego de que el cuerpo de policía Bolivariana de la entidad y la policía municipal Poliguajira incautaran un camión cargado de 7.800 kilos de arroz y harina cuando transitaba por el municipio para llevar su carga a Colombia de forma ilegal.
La indignación de los venezolanos no se hizo esperar, pues los funcionarios policiales prometieron que los alimentos incautados serían vendidos a la comunidad a precios justos, pero eso no sucedió. En cambio, diariamente los indígenas en la frontera deben pagar por un kilo de arroz 600 bolívares y un litro de aceite en 800 bolívares (esto es aproximadamente US$1 a cambio libre, pero un sueldo mínimo en Venezuela es de apenas US$12).
De acuerdo con Ferrer, la comunidad indígena del estado Zulia es testigo de que pasan centenares de camiones con contrabando hacia el país vecino y en complicidad con funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana, mientras que ellos no tienen acceso a los productos básicos de primera necesidad.
Para el candidato indígena opositor la situación en la Guajira venezolana se califica como zona de “genocidio, abandono y corrupción galopante”.
Contrabando e impunidad
El contrabando de alimentos y combustible es una realidad que se vive en la zona y que se ha intensificado con el pasar de los años.
En Venezuela existe la Ley sobre el delito de contrabando desde el 30 de diciembre de 2010, de acuerdo con la normativa, el que incurra en él puede ser sancionado con una pena de cuatro a ocho años en prisión. Pero la frontera es un lugar donde coexisten revendedores de combustible, de alimentos, víveres y de licor que bajo la mirada de funcionarios venezolanos y colombianos ofertan sus productos con sobreprecio.
El candidato indígena explicó que no solo se trata del contrabando de alimentos y productos básicos, sino que además los ciudadanos en la Guajira viven en condiciones deplorables.
Aseguró que aunque el expresidente Hugo Chávez decía que dignificaría al pueblo índigena, luego de 15 años la población continúa sin recibir los servicios básicos como la electricidad, el agua, salud de calidad y escuelas dignas para la educación.
“En la alta Guajira, no llega el agua potable por tubería; en algunas localidades el agua llega con camiones de la alcaldía, y cuando es así en muchos casos el ayuntamiento no le vierte el líquido a quienes no comparten su ideología”, aseveró Ferrer. De igual forma explicó que esa comunidad tampoco cuenta con oficinas bancarias ni oficinas de servicios públicos.
Promesas incumplidas
El representante de la comunidad indígena también hizo referencia a proyectos anunciados por el Gobierno que hoy en día están paralizados.

En 2014, el presidente de la Corporación de Desarrollo de la Región Zuliana (Corpozulia), general de brigada Néstor Luis Reverol, aseguró que “inundaría de sábila a La Guajira”, durante una inspección realizada a la planta procesadora de este rubro denominada Central de Procesamiento Agroindustrial del Aloe de la Guajira, Ceproalwayuu, C. A. Pero Birgilio Ferrer aseguró a PanAm Post que esta obra está actualmente paralizada.
Hizo mención a la fábrica de producción de leche caprina, bovina y de queso de cabra que en febrero recibió una inspección por el “ministro plenipotenciario para la Ofensiva Económica de la Región Occidental”, Asdrúbal Chávez. Ferrer aseguró que es un proyecto que también se encuentra sin producir.
De igual forma aseveró que el Parque Eólico La Guajira, compuesto por una estructura de aerogeneradores de electricidad ubicados en el estado Zulia, que está en construcción desde el año 2011, con un contrato para la empresa argentina IMPSA, hoy en día está paralizado.
En relación con este proyecto el medio de comunicación de tendencia oficialista Aporrea, publicó en abril de 2015 que luego de tres años de inaugurada la Fase 1-A del Parque Eólico la Guajira, fue abandonado y aseguran que el Ministerio de Energía Eléctrica responde que aún está “en estudio”y que desconocen si funcionará.
Virgilio Ferrer también mencionó otros proyectos paralizados como la siembra de camarones, el acueducto de La Guajira y algunas carreteras.
Genocidio indígena
Por más de cuatro años, el comité de DDHH de la Guajira ha denunciado la muerte de la población Wayúu en manos de los militares venezolanos que se encuentran activados a través del distrito militar número 1, sin embrago no ha sido posible un pronunciamiento de parte de los organismo del Gobierno ante esta situación.
La reconocida periodista venezolana Milagros Socorró denunció este viernes 7 de agosto que defensores de derechos humanos en la Guajira están siendo amenazados por dar a conocer la situación que se vive en la localidad.
https://twitter.com/MilagrosSocorro/status/629702035953352704
https://twitter.com/MilagrosSocorro/status/629701712035643392
Medios de comunicación locales informaron que hasta marzo de 2015 hubo 16 muertes violentas registradas en la Guajira venezolana en manos del Ejército venezolano, desde que se estableciera en 2010 como distrito militar.
Fue el caso de Yohander José Escacio Palmar, quien murió el pasado 24 de febrero. Testimonios aseguran que pasado el mediodía llegó un grupo de militares a la población de Guarero con la intención de quemar dos carros. Aparentemente este suceso se debía a un ajuste de cuentas con contrabandistas que se negaban a ceder ante los chantajes de los soldados.
Cuando la comunidad salió a impedir la quema de los vehículos, los militares abrieron fuego causando heridas a varias personas, daños materiales y la muerte de Yohander de un disparo en la espalda.
El candidato a la Asamblea Nacional dijo a PanAm Post que la etnia se siente desamparada, y calificó como “genocidio” lo que sucede en la frontera.
Denunció que los medios de comunicación nacionales no difunden los hechos.