Organismos defensores de la libertad de expresión y prensa condenaron este miércoles 9 de septiembre que la Corte Suprema de Justicia de Honduras rechazara el último recurso legal del periodista Julio Ernesto Alvarado para poder ejercer sus funciones como comunicador.
Reporteros Sin Fronteras (RSF) y PEN Internacional criticaron que la Corte Suprema hondureña haya omitido las directivas de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que exigían que Alvarado accediera a medidas cautelares para seguir ejerciendo el periodismo.
El periodista fue condenado desde diciembre de 2014 a no ejercer el periodismo ni cualquier actividad relacionada con la difusión de información durante 16 meses.
De acuerdo con RSF y PEN Internacional, ya no existe en Honduras un recurso para luchar contra la prohibición que pesa sobre el periodista, e instaron a la CIDH a actuar para que el Gobierno de ese país respete las medidas cautelares.
Emmanuel Colombié, responsable del Despacho América Latina de RSF, afirmó que esta decisión judicial “crea un precedente funesto para la libertad de expresión en el país”, a lo que agregó que “este largo proceso es una una herramienta de represión contra el periodista, que pertenece a uno de los medios de comunicación críticos con más audiencia en el país”.
Por su parte, John Ralston Saul, Presidente Internacional de PEN International, agregó que la Corte Suprema de Justicia de Honduras debe cumplir con las decisiones de la CIDH debido a que Honduras se comprometió legalmente a hacerlo.
De acuerdo con las ONG, Alvarado es juzgado por difamación, luego de que Belinda Flores Mendoza, decana de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, lo denunciara por haber difundido en su programa “Mi Nación” transmitido por Globo TV, la presunta falsificación de títulos universitarios.
Cabe destacar que Honduras se encuentra en el lugar 132 de 180 países, en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa de Reporteros Sin Fronteras publicada en febrero de 2015.
Fuentes: Reporteros Sin Fronteras.