Los expresidentes de España, José Luis Rodríguez Zapatero, y Panamá, Martín Torrijos, llegaron la noche de este martes a Venezuela para retomar esfuerzos por el inicio de un proceso de diálogo entre el Gobierno de Nicolás Maduro y la oposición.
Los exmandatarios hicieron contactos con representantes del oficialismo y se espera que se reúnan también con dirigentes de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD).
Los esfuerzos se habían retomado el 8 de julio, cuando Rodríguez Zapatero llegó también sorpresivamente a Caracas, pero el viernes 15 de julio los exmandatarios se retiraron sin mayores resultados.
En el encuentro participaron además de Maduro, los hermanos Rodríguez: la canciller Delcy Rodríguez, y el alcalde del municipio Libertador, Jorge Rodríguez.
Entre tanto, la oposición le presentó al presidente español sus condiciones para entablar el diálogo con el Ejecutivo: libertad a los presos políticos, apertura del canal humanitario, respeto a la Asamblea Nacional y a la Constitución, cambio de locación para las conversaciones, que se lleve a cabo el referendo revocatorio este año y la ampliación de mediadores.
El pasado 15 de julio, Zapatero insistió en que el Vaticano se involucre en el objetivo de mediación internacional que intenta liderar en Venezuela; esto luego de que la MUD incluyera la mediación de la Iglesia Católica dentro de sus condiciones para iniciar el diálogo.
El referendo es “innegociable”
En una comunicado, el líder opositor Henrique Capriles Radonski aclaró a Rodríguez Zapatero que el referendo revocatorio sí es prioridad para los venezolanos, pues asegura que es un “proceso electoral que le pertenece al pueblo venezolano y no a los actores políticos”.
Dijo además que con la presencia de Zapatero en el país, el Gobierno de Nicolás Maduro busca retrasar la consulta popular y ante esto aseguró que en Venezuela debería dialogarse para “fijar la fecha para revocar a Nicolás Maduro”.
“El Gobierno lo que pretende es comprar tiempo, por eso llamaron a los ex presidente Leonel Fernández, Manuel Torrijos y José Luis Rodríguez Zapatero. Nosotros no vetamos a nadie, pero Zapatero ha dicho que el problema económico es consecuencia de que no hay diálogo. Hay una falla de diagnóstico, lo invito para que vea a los venezolanos que pasan hambre, para que vaya a un hospital y vea a la gente postrada en una cama o a una cola para que hable con las personas y comprenda que los venezolanos no podemos perder más tiempo”; sentenció.
Dijo además que con el supuesto diálogo el Gobierno de Venezuela busca”lavarse la cara frente al plano internacional para que los demás países no hablen de lo que pasa” en el país”.
Fuente: El Nacional