El Instituto CASLA de Praga presentará ante la Corte Penal Internacional de La Haya, al menos 55 casos de tortura en Venezuela. El instituto fundado en 2007, actúa como asesor del Ministerio de Asuntos Exteriores checo.
Dicho organismo, que fue fundado en 2007 y actúa como asesor del Ministerio de Asuntos Exteriores checo, denunciará de manos de la abogada Tamara Sujú medio centenar de casos de tortura y represión emprendidos por el Gobierno de Nicolás Maduro.
“Hay torturas masivas desde el 2014 para acá contra detenidos sin importar sexo, edad, profesión, estado físico y mental de las personas”, declaró Sujú, directora ejecutiva del CASLA.
El “Informe sobre casos emblemáticos de torturas y métodos utilizados en Venezuela en los años 2002-2016” tendrá carácter clasificado hasta que el fiscal de La Haya ordene la instrucción y luego se decida abrir juicio. Se utiliza el formato del relator especial de la ONU contra la tortura. Un formato donde figuran nombres y apellidos de víctimas, instituciones implicadas y personas que participaron en los actos de tortura.
Se presentarán testimonios de venezolanos que han sido víctimas de asfixia mecánica, vinagre en el rostro, golpes contundentes, descargas eléctricas, etc.
En los testimonios a exponer se hace referencia a una gran cantidad de venezolanos que viven en Rubio, estado Táchira, localidad fronteriza con Colombia. Allí, a personas inocentes sin antecedentes penales les sacaron fotos y las expusieron en redes sociales para que recibieran múltiples amenazas de muerte.
Un caso destacado es el del preso político Vasco Da Costa, de 55 años, detenido dos veces. Dice en su testimonio que fue encapuchado y golpeado con objetos contundentes, con palo con punta de clavo y con sacos de arena, y que fue golpeado hasta desfallecer con la cacha de la pistola.
Él también fue sometido a descargas eléctricas en los codos y partes íntimas, bañado con aguas putrefactas, objeto de actos lascivos e incomunicado.
Según Sujú, Da Costa actualmente está en una celda con 17 presos comunes, pero la familia ha denunciado que cuando lo sacan al patio les hacen cantar consignas oficialistas y él se niega, y por esto le golpean.
Estos casos son solo algunos de los ejemplos de los testimonios que presentará la abogada, quien denuncia que “la impunidad es tal que en gran porcentaje ninguno de los casos de tortura ha sido investigado y castigado”.
Fuente: El Nuevo Herald