Iniciará en Brasil un juicio contra ocho hombres acusados de conspirar para realizar actos terroristas durante los Juegos Olímpicos en Río de Janeiro 2016.
El juez brasileño Marcos Josegrei da Silva de la Corte Federal en Curitiba, Brasil, aceptó los cargos que se le imputan a los implicados y asegura que hay evidencias suficientes para iniciar el juicio contra los presuntos terroristas.
El inicio de dicho proceso judicial marcará la historia de ese país suramericano porque se trata del primero en realizarse bajo la ley contra terrorismo aprobada a principios de año.
Los ocho hombres son acusados de planificar ataques inspirados por el Estado Islámico contra extranjeros, homosexuales, musulmanes chiíes y judíos durante el magno evento deportivo.
Los acusados también fueron imputados por cargos de crimen organizado y corrupción de menores.
Los ocho detenidos son parte de un grupo de 10 personas que fueron arrestadas en julio, sólo semanas antes del inicio de los Juegos Olímpicos, como parte de la “Operación Hashtag” de la Policía federal. Un undécimo sospechoso se entregó voluntariamente poco después de los arrestos.
Entre las pruebas consignadas se encuentran las comunicaciones entre los sospechosos a través de aplicaciones de Internet por las que hicieron mención sobre entrenamientos, acceso a armas y posibles ataques.
Al momento del arresto, las autoridades dijeron que solo dos de los hombres, todos brasileños de entre 20 y 40 años, se conocieron en persona en el 2012, cuando viajaron a Egipto para aprender árabe después de que se convirtieron al Islam.
Los acusados son Oziris Moris Lundi dos Santos Azevedo, Luis Gustavo de Oliveira, Levi Ribeiro Fernandes de Jesus, Leonid El Kadre de Melo, Israel Pedra Mesquita, Hortencio Yoshitake, Fernando Pinheiro Cabral y Alisson Luan de Oliveira.
Las penas que deberán ser aplicadas para los delitos de terrorismo se sitúan entre los 12 y los 30 años, un castigo especialmente fuerte si se tiene en cuenta que la nueva ley antiterrorista puede complementarse con otros crímenes si fuese necesario tales como el homicidio o la posesión de armas de fuego sin la debida autorización.
Fuente: Reuters