Al menos 70 venezolanos se encuentran varados en la ciudad de Miami (EE. UU.) luego de que la aerolínea Santa Bárbara cancelara los vuelos que tenía planificados del viernes 8 al martes 12 de septiembre por el paso del huracán Irma.
El diario estadounidense El Nuevo Herald reportó que las decenas de viajeros convirtieron el aeropuerto internacional de Miami en una residencia improvisada; mientras, representantes de la misma empresa aérea en Estados Unidos no se han presentado para atender a los afectados.
Los pasajeros de Santa Bárbara Airlines (SBA) se han encontrado con una falta de coordinación y de ayuda que los ha obligado a permanecer en el aeropuerto por varios días, a comer en los pasillos, gastando los pocos ahorros que les quedan, a dormir en el piso y hasta a asearse como pueden en los baños de la terminal.
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Inicialmente eran 300 pasajeros varados, pero la mayoría ha logrado irse comprando pasajes en otras aerolíneas y han podido regresar a Venezuela.
La aerolínea de vez en cuando abre espacios en los vuelos para que algunos de los pasajeros varados puedan retornar; sin embargo, aún restan 70 venezolanos, entre ellos niños y adultos mayores.
A causa de la crisis económica provocada por la inflación y el control de cambio impuesto en el 2003, viajar a Venezuela se ha vuelto una misión casi imposible. Cada vez más aerolíneas han anunciado su retiro del país suramericano, la última en salir del este país fue Delta Air. Por lo tanto, cada vez hay menos opciones para viajar y los costos de los pasajes son más elevados.
Explica el Nuevo Herald que otra preocupación que enfrentan los viajeros es la de su estatus migratorio debido a que algunos están por superar los 90 días de permanencia legal que les permite la visa de turista.
“¿Qué puedo hacer yo? No voy a poder entrar más a Estados Unidos por culpa de ellos”, indicó Juliani Massedo, una de las afectadas.
Los viajeros denuncian que la aerolínea ha ignorado las solicitudes haciendose la de “la vista gorda”.
El grupo indicó además que la mañana de este lunes otro empleado les dijo con desdén que no tenía nueva información para ellos y entonces le hizo señal con las manos para que se alejaran. “Como a los perros”, añadió Beniamina Di Marino.
El problema, aseguran, es que la aerolínea vende boletos para dos vuelos diarios, pero solamente sale uno, por lo que gente varada se va acumulando.
Al ser consultado sobre la situación, el vocero del aeropuerto de Miami, Greg Chin, respondió que “es responsabilidad de la aerolínea Santa Bárbara hacer acomodaciones para sus pasajeros con boletos”.
Fuente: El Nuevo Herald.