El ganador de la primera vuelta electoral en Chile, Sebastián Piñera, denunció irregulares con las papeletas de votación, las cuales habrían beneficiado al candidato oficialista Alejandro Guillier, su principal contrincante.
Aunque Piñera asegura que no ha puesto en duda el resultado de la primera vuelta, donde salió victorioso, señaló que “muchos votos en las mesas” estaban marcados previamente, a favor de Guillier o de la también candidata de izquierda, Beatriz Sánchez.
Piñera aseguró que sus afirmaciones se basan en las denuncias ciudadanas que circularon a través de los medios de comunicación.
Comparto con Uds mi declaración respecto información entregada por diversos medios de comunicación, en relación a denuncias hechas por ciudadanos el día de la 1ra vuelta de la elección presidencial #VerdadPorDelante pic.twitter.com/Fwva0dKKx1
— Sebastian Piñera (@sebastianpinera) December 4, 2017
El candidato no quiso responsabilizar al Servicio Electoral: “Solo dije que los medios habían afirmado sobre denuncias ciudadanas en el sentido que alguien se avivó en las mesas y marcó el voto antes que el electorado”; reiteró.
El candidato afirmó que en el balotaje los partidos que lo apoyan tendrán representantes en la mayoría de las mesas para evitar irregularidades. “Tiene que haber ojos vigilantes”, aseveró.
A las declaraciones de Piñera se sumó el excandidato José Antonio Kast, quien tras perder en la primera vuelta electoral, declinó su apoyo a favor del expresidente chileno.
“Claramente hubo fraude”, resaltó Kast durante una entrevista a T13 , y agregó que hay denuncias y testimonios que se pueden encontrar hasta en las redes sociales.
“Cualquiera que haya manipulado, que haya puesto un puntito en un voto antes que ese voto sea entregado, eso es fraude, sea un voto o sean mil”; sentenció.
Pero desde el oficialismo las críticas a dichas denuncias de fraude no se hicieron esperar, por una parte Guillier calificó las declaraciones de Piñera como “una infamia contra Chile”, y por otra el organismo electoral Servel llamó a la “responsabilidad y prudencia”.
Bachelet también reaccionó: “Chile tiene un prestigio internacional por sus elecciones correctas y transparentes. Seamos responsables y no desacreditemos nuestras instituciones democráticas”.
Sube el tono y Piñera se debilita
El próximo 17 de diciembre se llevará a cabo la segunda vuelta electoral donde se definirá quién será el próximo presidente de Chile; ante esto, los candidatos subieron el tono de sus declaraciones y emprendieron una campaña de señalamientos y acciones.
El pasado 29 de noviembre, Sebastián Piñera, comparó a su contrincante Alejandro Guillier, con el dictador de Venezuela, Nicolás Maduro.
“Yo veo que el candidato está cada día más violento, más demagogo, más populista”, aseveró el expresidente en relación con la propuesta de Guillier de eliminar la deuda del Crédito con Aval del Estado (CAE) al 40 % de los estudiantes universitarios más pobres.
Piñera no ha sido el único que ha manifestado su preocupación porque el candidato Alejandro Guillier convierta al país en una “Chilezuela“.
El pasado martes 21 de noviembre, la diputada electa por el partido Renovación Nacional, Érika Olivera, también opinó que en caso de ganar el candidato oficialista el escenario sería similar al del país en crisis.
“A mí no me gustaría tener un país como Venezuela. Y lo digo sinceramente”, dijo la diputada, agregando que con Guillier en la presidencia lo más probable “es que vayamos hacia allá”.
Pero las recientes declaraciones de presuntas irregularidades durante la primera vuelta electoral enfurecieron a la representante del Frente Amplio de izquierda, Beatriz Sánchez, quien quedó de tercera en los comicios.
Sánchez, que no había anunciado a quién apoyaría en el balotaje, decidió la noche de este lunes 4 de diciembre que votará a favor del oficialista Guillier.
“Menciona a dos candidatos y me menciona a mí, directamente. Esto es cruzar todo límite y yo lo dije antes y lo digo ahora como excandidata: no se juega con Chile y no todo vale a la hora de una elección presidencial. Mi voto es contra Sebastián Piñera y para eso voy a votar por Alejandro Guillier”, señaló.
La victoria de Piñera dependería de los abstencionistas
Sebastián Piñera ganó la primera vuelta electoral en el marco de unos comicios marcados por una mayoría que se abstuvo (55 %).
Aunque sondeos previos le adjudicaban a Piñera un 44 % de los votos, el candidato de Chile Vamos obtuvo 36,64 % del apoyo, cifra que aunque lo ubicó en primer lugar no es suficiente para acceder a la presidencia chilena.
Entre los ocho candidatos que se enfrentaron en la primera vuelta, en total, las fuerzas de izquierda obtuvieron algo más de 3,6 millones de votos frente a los 2,9 millones de la derecha.
Por eso la situación para el expresidente es compleja porque hay dos candidatos de izquierda que al respaldar al oficialista Guillier le otorgarían un 10 % más.
Con un padrón electoral que se aproxima a los 14.30.0000 habilitados, solo 45 % salieron a ejercer su derecho, o sea 6.500.000 personas.
El candidato que logre revertir estas cifras a su favor será el que posiblemente gane la Presidencia de Chile.