¿Después del 20 de mayo qué? Esa es la pregunta que Venezuela se hace tras enfrentar una crisis sin precedentes y sin conocer cómo y cuándo será la salida del régimen. Y aunque es impredecible saber qué pasará, analistas consideran que lo importante es que exista una “palanca nacional e internacional” con la que se logre la caída de Nicolás Maduro.
A solo tres semanas de las fraudulentas presidenciales, donde se prevé que Maduro saldrá reelecto, el Frente Amplio Venezuela Libre, coalición disidente formada por partidos de oposición y “exchavistas”, llamó a los ciudadanos a una especie de “boicot” el domingo 20 de mayo y los convocó a quedarse en sus casas.
Sin embargo, analistas políticos consideran que por el contrario, ese día los venezolanos deben organizarse y concentrarse en un solo lugar para demostrar quiénes son los que no van a votar; que se trate de una sola marcha o una sola convocatoria para que se vea el masivo descontento.
María Teresa Romero, periodista con doctorado en Ciencias Políticas, le señaló al PanAm Post que lo importante es que se demuestre quiénes no están de acuerdo con dichas “elecciones”.
“Que se vea la cantidad de gente que no va a ir a votar de forma pacíficia; y que además la diáspora se active el 20 de mayo con protestas a nivel mundial”, sugirió.
Por su parte, Jorge Tricás, politólogo y catedrático de sociología política, coincide con Romero; aseguró que el mismo día de las supuestas elecciones hay que tomar el “espacio público”. “No se trata de quedarse en casa, debería organizarse una actividad enfocada a trascender todo el fraudulento evento electoral; algo contundente”, señaló.
Sin embargo, aclaró que aunque el 20 de mayo no vaya a cambiar nada en el país, lo importante es lo que deberá suceder luego de esa fecha.
¿Y después qué?
Romero señaló que “después del 20 de mayo es cuando tienen que fortalecerse todas las estrategias de la oposición en contra del Gobierno”.
“La gran mayoría de los países democráticos ha dicho que no va a reconocer esas elecciones, de modo que eso tiene que hacerse. Tiene que haber una estrategia junto con la comunidad internacional; yo creo que valdrían la pena nuevas protestas en el país, giras internacionales por parte de personeros de la oposición y tomar como bandera lo que decidió el Tribunal Supremo de Justicia de destituir y enjuiciar a Nicolás Maduro”; señaló.
Para Romero es importante que continúe la lucha internacional con “todas las herramientas jurídicas y políticas”, y que, además, en lo interno en la oposición exista una verdadera unidad con una misma visión a pesar de las diferencias.
Hay que presionar la salida de un presidente que no será legitimado a nivel internacional; y a nivel interno tienen que haber protestas.
Jorge Tricás señaló que la oposición debe alinearse con la comunidad internacional y hacer lo que desde afuera se recomiende, pues los países democráticos están preparados para ayudar a rescatar a Venezuela.
La comunidad internacional será fundamental
Hay que reconocer que los países democráticos del mundo han iniciado una lucha internacional contra la dictadura en Venezuela, una lucha que inició con pronunciamientos y que con el paso del tiempo se convirtió en sanciones económicas contra los protagonistas del régimen. Sin embargo, a partir del 20 de mayo, los venezolanos dependerán aún más de la presión que pueda ejercerse fuera de las fronteras.
Mariano de Alba, abogado experto en Derecho Internacional e internacionalista, afirmó para el PanAm Post que la comunidad internacional “tiene una labor titánica por delante”.
Además, señalo la importancia de que todos los países que desean ver libre a Venezuela desconozcan los resultados del 20 de mayo y que implementen mayores sanciones a funcionarios; así como el embargo de activos de esas personas en el exterior.
“En primer lugar, deberán buscar mecanismos que permitan presionar más a miembros de la coalición de Gobierno a buscar una salida, tratando de afectar lo menos posible a la población venezolana que ya está sufriendo en demasía por las políticas fallidas del Gobierno”, expresó.
Para De Alba, será importante que las naciones mantengan su presencia diplomática en Venezuela y desde allí ejecuten las gestiones necesarias para que regrese la democracia al país.
“Al mismo tiempo, hará falta una labor clave de diplomacia en Venezuela y en el exterior para explorar con qué miembros de la coalición de Gobierno se puede trabajar para tratar de buscar una salida a la situación actual”, sentenció.