La estatal petrolera Pdvsa pagó con bonos parte de su deuda a la minera Gold Reserve; una situación que aunque significa un paliativo momentáneo, en realidad deja a Venezuela más endeudada y con mayores posibilidades de caer en default.
De acuerdo con el diario estadounidense The Wall Street Journal, Venezuela realizó un pago a la compañía minera utilizando bonos del gobierno en lugar de dinero en efectivo; se trata de la primera vez que eso sucede, ya que las sanciones impuestas por Estados Unidos prohibieron transacciones similares.
La empresa canadiense dijo en un comunicado que había recibido bonos del gobierno venezolano con un valor de mercado estimado de alrededor de US$ 88.5 millones. El pago se realizó como parte de un acuerdo de conciliación que exige que el gobierno venezolano le pague alrededor de mil millones de dólares relacionados con un proyecto minero en el país.
“Esta es la primera transacción en la que el gobierno venezolano le paga a alguien con bonos desde las sanciones”, dijo Francisco Rodríguez, economista jefe de Torino Capital, un banco de inversión con sede en Nueva York.
A pesar de las sanciones de los Estados Unidos, las compañías pueden solicitar y recibir una exención a una sanción, pero dichas licencias no se hacen públicas.
Los bonos transferidos a Gold Reserve están en una lista de bonos que el gobierno de los EE. UU. ha permitido operar, de acuerdo con una fuente de WSJ.
José Toro Hardy, economista venezolano, señaló a PanAm Post que presuntamente Gold Reserve habría preferido aceptar estos bonos antes que quedarse sin cobrar.
¿Será que Gold Reserve podrá cobrar esos bonos que recibe en pago?
— Jose Toro Hardy (@josetorohardy) August 17, 2018
“Yo imagino que Gold Reserve prefirió aceptar los bonos que quedarse sin el pago; pero aún cuando aceptó esos bonos probablemente tampoco pueda cobrarlos (…) el tema es que tanto Pdvsa como la República de Venezuela están ya en una situación de default selectivo, donde ha pagado unos bonos y otros no”, señaló.
Toro Hardy resaltó que en el mercado existe una “gran duda” sobre los pagos que adeuda Venezuela “por la situación en la que se encuentra la economía venezolana, por el enorme déficit fiscal, por la caída de la producción petrolera, por todas las razones que hoy conocemos”, agregó.
“Supongo que Gold Reserve pensó que o cobra de esta manera, o le va a ser muy difícil cobrar”, sentenció.
Y es que la empresa canadiense se suma ahora a los cientos de acreedores que hoy reclaman su deuda por la falta de pago por parte de Venezuela y que estarían a la espera de apropiarse de los activos de Pdvsa, en el exterior tal y como lo haría la minera canadiense Crystallex.
Hay que recordar que la decisión de un juez estadounidense a favor de Crystallex implicaría que Venezuela estaría a punto de perder Citgo, su más grande activo en el exterior.
PDV Holding Inc., propiedad de la petrolera estatal venezolana Petróleos de Venezuela (PDVSA), es propietaria de Citgo Holding Inc., que a su vez posee Citgo Petroleum Corporation, que tiene tres refinerías y oleoductos en Estados Unidos.
Citgo pueden refinar 749.000 barriles diarios y la refinería de Lake Charles es la sexta refinería más grande en Estados Unidos.
El caso abre la vía para que más de una decena de compañías y tenedores de bonos apunten a la refinería venezolana para cobrar las demanda de arbitraje internacional por activos expropiados bajo el mandado de Hugo Chávez Frías.
Citgo: el tesoro ante el default
Venezuela ha entrado en default “por todos lados”. Los acreedores que aún esperan por su pago también están detrás de Citgo, tal y como Crystallex.
Un reportaje de la BBC reveló que expertos legales y financieros anticipan que ante un impago se iniciará un complicado proceso de maniobras legales para cobrarle a Venezuela.
El Gobierno de Maduro, ante la caída de sus ingresos por la bajada de los precios del petróleo y su menguante producción de crudo, ha dicho que desea reestructurar cerca de USD $63.000 millones de su deuda.
Si esta reestructuración no se lograra, hay una serie de activos de propiedad venezolana en el extranjero que será el primer objetivo de los acreedores.
“Citgo posee tres refinerías en Estados Unidos y sería el principal objeto de deseo de los acreedores”, señalaron los especialistas.
“El más llamativo activo es la empresa de refinación y distribución de combustible basada en Estados Unidos, Citgo, la sexta refinería más grande del país, con instalaciones en los estados de Luisiana, Illinois y Texas y decenas de miles de estaciones de servicio”.
Pero ante todo esto, el economista Luis Oliveros señaló: “el último que llegue a cobrar, no va a cobrar porque todos los afectados por impago de Venezuela van detrás de Citgo y de los pocos activos que tiene el país en el exterior”, concluyó.
Según Oliveros, conocer cuánto vale Citgo es una discusión constante entre los economistas, pero, según sus estimaciones, si Venezuela hoy decidiera vender Citgo para pagar sus deudas, no recibiría más de USD $4.000 millones, de los cuales la mitad es de Rosneft y la otra mitad para pagar todas las deudas pendientes. A Venezuela le quedaría “muy poco”.