El Gobierno de Estados Unidos, que se ha convertido en el principal aliado de los venezolanos, anunció que destinará 120 millones de dólares en ayuda humanitaria para atender la crisis migratoria ocasionada por el chavismo.
Tras la visita de Ivanka Trump, hija y asesora del presidente estadounidense Donald Trump, a Cúcuta, ciudad fronteriza colombiana, se aprobó tal cantidad de dinero para ayudar a paliar la situación que viven los venezolanos en el país de acogida. El monto anunciado elevaría el total donado por EE. UU. desde 2017 a 376 millones de dólares.
“Estamos con Venezuela en su lucha para restaurar la democracia”, señaló Ivanka, cuyo viaje a Colombia representa una muestra más de cómo EE. UU. se preocupa ante la situación que enfrentan los venezolanos; y en lugar de emitir comunicados ha decidido tomar acciones.
En la Frontera Colombo-Venezuela sostuvimos reunión con el sub-secretario de EEUU y la consejera Ivanka Trump, hablamos sobre los diversos problemas que atraviesan la mujer Venezolana dentro y fuera del Territorio. pic.twitter.com/WEAP36VpcQ
— Gaby Arellano (@gabyarellanoVE) September 5, 2019
La asesora de Trump visitó la Casa de la Mujer, un refugio para migrantes apoyado por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID). Además, se reunió con Julio Borges, el canciller del presidente (e) Juan Guaidó. Además de Ivanka, en el encuentro también participaron John J. Sullivan, vicesecretario de Estado, y Mark Green, director de la USAID.
La nueva donación de EE. UU. busca proveer apoyo vital que incluye “comida de emergencia y asistencia médica para los venezolanos que están en Brasil, Colombia, Ecuador y en toda la región”, detalló en un comunicado el vocero del Departamento de Estado.
Estados Unidos, el mejor aliado
El Gobierno de EE. UU. es el que más sanciones ha emitido contra la dictadura chavista, debido a las constantes violaciones de esta contra los derechos humanos y a la corrupción liderada por Nicolás Maduro.
Ha sancionado a más de 100 funcionarios del chavismo; estableció un embargo petrolero y económico recortándole los ingresos a Maduro; su justicia ha investigado y condenado casos de narcotráfico y lavado de dinero desde la estatal petrolera PDVSA; y desde el Senado de ese país se impulsa una ley para presionar aún más al régimen.
El Gobierno Trump fue el primero en reconocer a Juan Guaidó como presidente (e) de Venezuela, y el primero también en recuperar las sedes diplomáticas del país para que la oposición pudiera manejarlas.
Asimismo, EE. UU. es el país que ha congelado más bienes del chavismo y que dejó al principal activo de Venezuela en el extranjero, Citgo, en manos de Guaidó. Ningún otro país en el mundo ha actuado con mayor contundencia en contra de la dictadura, a tal punto de poner a disposición sus militares para lograr la salida de Maduro.
Migración venezolana al borde del colapso
Hasta ahora solo se ha logrado recaudar menos de la tercera parte de todo el dinero que se necesita para cubrir las necesidades de los más de cuatro millones de venezolanos que han huido de la dictadura liderada por Maduro.
La crisis migratoria venezolana es grave y los países receptores se están viendo colapsados. De acuerdo con el Gobierno colombiano, del presupuesto acordado con la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para afrontar la crisis venezolana en 2019, solo se ha recibido un 30 %, lo que significa que la estimación es solo de 70 dólares por migrante. En Colombia hay más de 1,4 millones de venezolanos y la cifra no deja de aumentar.
La Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) advirtió que si la situación en Venezuela no cambia, el flujo de migrantes venezolanos «va a continuar» sin que nada lo detenga. La cifra de exiliados podría superar los seis millones.
Solo en Colombia se estima que el costo de atender a los migrantes nacionales equivale a 0,3 % del producto interno bruto (PIB), lo que genera una presión en las infraestructuras de servicios públicos, sistemas de salud y educativos.
Mientras aumenta la migración venezolana, los países de la región empiezan a poner trabas para reducir el flujo de venezolanos. Ecuador, Perú y Chile ahora exigen una visa; mientras que Colombia se ve colapsada por miles de ciudadanos represados.
El director de Migración Colombia, Christian Krüger Sarmiento, pidió a Ecuador revisar la imposición de visado a los venezolanos que buscan entrar a ese país, pues considera que la medida fomenta la irregularidad y destruye familias.
“Respetamos las decisiones que de manera soberana toma cada país, pero debemos decir que la imposición de visado a venezolanos por parte de Ecuador está desintegrando familias, incentivando la irregularidad y la ilegalidad”, dijo.
“Desde el Gobierno Nacional hemos sido enfáticos en afirmar que el cierre de una frontera o la exigencia de un visado no frena una población que migra por hambre y necesidad. Por el contrario, este tipo de medidas lo que ocasiona es que el migrante deba recurrir a redes de tráfico o a la corrupción, para poder lograr su objetivo”, agregó el funcionario.