El Gobierno de Donald Trump prepara nuevas sanciones contra Cuba por su respaldo a Nicolás Maduro y también analiza el papel que Rusia ha jugado para que el tirano siga en el poder.
Elliott Abrams, enviado especial de Estados Unidos para Venezuela, ofreció una entrevista a la agencia de noticias Reuters en la que señaló que tanto Cuba como Rusia han brindado un “salvavidas a Maduro”; esto tras las sanciones internacionales y el cerco político y diplomático por parte de los países de la región.
“Siempre estamos buscando formas de exprimir a (Cuba) porque no vemos ninguna mejora en su conducta ni con respecto a Venezuela ni a los derechos humanos internamente”, dijo Abrams.
El Gobierno de Trump se ha enfocado en emitir sanciones contra el régimen de Maduro y presionar a sus principales aliados para lograr la caída de la tiranía en Venezuela.
A principios de septiembre, Estados Unidos anunció nuevas sanciones contra Cuba para “aislar financieramente” al régimen de la isla. En julio también tomó medidas contra la compañía estatal Cubametales por su relación con el régimen chavista.
El titular de la cartera del Tesoro argumentó que Estados Unidos “responsabiliza al régimen cubano por la opresión al pueblo y el apoyo a otras dictaduras en toda la región, como el régimen ilegítimo de Maduro”.
De acuerdo con Abrams, las nuevas sanciones que emitirá el Gobierno Trump en las próximas semanas, probablemente apunten al sector turístico de la isla, así como al petróleo que Venezuela entrega a La Habana.
Cuba depende de Maduro y este de los Castro
Cuba es uno de los principales aliados de Venezuela, país del que recibe unos 100 000 barriles de petróleo cada día a precios preferenciales gracias a varios acuerdos de cooperación.
La isla paga el petróleo con asesorías deportivas y culturales y con un contingente de médicos que engrosan las filas de un programa social de atención primaria conocido como Barrio Adentro. Pero lo que más le interesa a Maduro es el ejército de militares cubanos y de inteligencia que hoy rodea al régimen, protegiéndolo con actividades del G2.
A pesar de las sanciones de Estados Unidos contra los regímenes de Cuba y Venezuela, los aliados socialistas están haciendo hasta lo “imposible” para evadirlas y continuar con su poderío.
El pasado mes de marzo se conoció que la isla continúa enviando militares cubanos para sostener a Maduro. “Están citando a los jóvenes, los están haciendo comprometerse, firmar, para ir a Venezuela cuando haga falta”, afirmó un cubano en un video publicado por el periodista Yusnaby Pérez.
Con Venezuela, el régimen de los Castro logró mantener el apoyo financiero que le permite continuar sometiendo a los cubanos. Por eso para este la permanencia del chavismo en el poder es esencial para su subsistencia.
Putin, Maduro y el duro discurso de Estados Unidos
En relación con Rusia, el funcionario estadounidense prefirió ser cauteloso a la hora de referirse a sanciones contra la estatal rusa Rosneft. Dijo que la administración estaba “observando más de cerca las formas en que Rusia mantiene el régimen”, pero se negó a especificar entidades o individuos.
A principios de agosto, Trump congeló los activos estadounidenses del régimen venezolano y amenazó con “sanciones secundarias” a cualquier empresa o persona que hiciera negocios con el chavismo. La medida abría la puerta para imponer sanciones a Rosneft, que en los últimos meses ha tomado alrededor de la mitad de las exportaciones de crudo de Venezuela.
En las últimas semanas el Gobierno de Estados Unidos se ha dedicado a dar a conocer cómo el Gobierno de Vladímir Putin ha participado en mantener a Maduro en el poder. Su discurso se ha dedicado a criticar y condenar la relación estrecha entre el régimen de Venezuela y el de Rusia.
Adicional a esto, Craig Faller, jefe de operaciones del Comando Sur de Estados Unidos, señaló que “hay cientos de contratistas y fuerzas rusas en Venezuela ahora mismo”.
Abrams, por su parte, ha aclarado que el papel de Rusia se enmarca en ayudar a Maduro a vender petróleo y a evadir las sanciones estadounidenses. “Hay como 150 efectivos rusos en Venezuela. Algunos son técnicos. Así que hay docenas de efectivos armados. Si hubiese una intervención de EE. UU., se apartarían. No son locos. Pero eso no es algo que está siendo contemplado ahora”, afirmó.
“El papel ruso es en parte psicológico y político: apoyar a Maduro, bloquear las cosas en el Consejo de Seguridad de la ONU y dar la sensación de que hay un gran país que lo respalda”, agregó, aunque apuntó que la petrolera Rosneft y los bancos rusos “han sido muy útiles” para Caracas.
La tiranía de Venezuela estaría usando a Rusia como un salvavidas en todos los ámbitos, mientras el Gobierno de Putin consolida su presencia en la región, retando constantemente al de Estados Unidos.
A Putin no le conviene, bajo ninguna circunstancia, que Maduro abandone el poder. Sobre todo luego de recibir gran parte de las riquezas venezolanas, pues con la economía del país suramericano devastada por más de seis años de recesión, el Gobierno de Maduro ha recurrido cada vez más a Rusia en busca del dinero y el crédito que necesita para sobrevivir, ofreciendo a cambio preciados activos petroleros estatales.
Analistas internacionales aseguran que Rusia sigue respaldando a Maduro no solo para aumentar su presencia en América Latina e incomodar a Estados Unidos, sino también porque Venezuela le ha otorgado millonarias concesiones en materia financiera.