Guyana y Estados Unidos se unen en la lucha contra el narcotráfico con la intención de acorralar aún más al régimen de Nicolás Maduro. Las autoridades de ambos países anunciaron que desplegarán patrullas marítimas para controlar el narcotráfico en la frontera con Venezuela.
El diario local Guyana Chronicle abrió con un editorial titulado Los brazos protectores y de refuerzo del Gran Hermano, en relación con la reciente visita del secretario de Estado, Mike Pompeo, a Guyana y las repercusiones políticas y económicas de esta.
El editorial subraya unas declaraciones del presidente de Guyana, Irfaan Ali, en las que, con motivo de la visita de Pompeo, subrayaba que el país sudamericano y Estados Unidos profundizarán la cooperación en el área de seguridad, con especial atención a la seguridad marítima y patrullas conjuntas, para luchar contra el tráfico de estupefacientes.
El secretario de Estado aprovechó su gira por cuatro países de Sudamérica para presionar y discutir sobre la salida de Maduro, acusado en Estados Unidos por cargos de narcotráfico.
«Maduro es el cabecilla del narcotráfico más implicado del hemisferio», dijo el presidente de Estados Unidos, Donald Trump tras descertificar a Venezuela y Bolivia por incumplir de «manera demostrable» sus compromisos internacionales para combatir el narcotráfico.
Venezuela es un punto en el que se está acumulando gran cantidad de cocaína, y desde donde se distribuye a todos los países del mundo. De acuerdo con el comisario Santos Bernal Uceda, jefe de la Unidad de Cooperación del Cuerpo Nacional de Policía adscrita a la Comunidad de Madrid en España, los cargamentos de droga que llegan a Europa y a Estados Unidos pasan de Colombia a Venezuela y se almacena en el delta del Orinoco.
En el país suramericano opera el Cartel de los Soles, encabezado por funcionarios del Ejército venezolano y miembros del régimen de Maduro. De acuerdo con las investigaciones, dicha organización criminal mantiene vínculos con el Cártel de Sinaloa, de México, y con las narcoguerrilas colombianas Farc y ELN.
Cómo Venezuela exporta cocaína al mundo
Desde Venezuela se ingenió una nueva modalidad para exportar cocaína. Ahora barcos pesqueros hacen trasbordo y distribuyen la droga en embarcaciones más pequeñas en altamar.
«Hemos detectado una modalidad nueva que es el acopio en el mar, que son buques pesqueros o más grandes que salen desde Venezuela, bordean nuestro mar territorial cargados con hasta cinco toneladas y van distribuyendo esa carga en botes más pequeños en la mitad del mar para que continúen su destino», informó al diario El Colombiano el capitán de Navío Federico Alberto Sierra.
El modus operandi que están utilizando los narcotraficantes desde Venezuela es el mismo que ha utilizado el régimen de Maduro para exportar petróleo: hace trasbordo en altamar y envía el cargamento como «mercado negro».
A Venezuela, reconocido por tener las mayores reservas de petróleo del mundo, ahora también se le conoce como un país productor de cocaína. La tiranía de Maduro convirtió al país suramericano en una «potencia emergente en producción y procesamiento ilícito de drogas», así lo señaló el diario ABC en un reportaje.
De acuerdo con el diario español, Venezuela no solo es puente para la exportación ilícita de cocaína desde Colombia, sino que ahora también cultiva, produce y procesa estupefacientes en «cantidades incipientes pero importantes» debido a los vínculos que existen entre las narcoguerrillas y el Cártel de los Soles:
Ante la reducción de la producción petrolera y la pérdida de su ingreso como principal fuente de divisas, el Cártel de los Soles ha recurrido al narcotráfico manejado por las FARC y el ELN como su fuente de ingreso alterno pero a un costo social sangriento que competiría con los carteles mexicanos y centroamericanos.