Este jueves se anunció la salida oficial de Panamá de la lista de países considerados un riesgo por presentar deficiencias estratégicas en la lucha contra el lavado de dinero procedente del narcotráfico y el terrorismo, que cada año elabora el Grupo de Acción Financiera (GAFI).
El organismo internacional incluyó a panamá en su lista gris en junio de 2014, después de un análisis hecho por el Fondo Monetario Internacional en el que se evidenció que la nación centroamericana presentaba fallas en su sistema de prevención de lavado de dinero.
Para el momento en que se hizo la calificación, Panamá no cumplía ni con uno solo de los 16 requisitos que exige el GAFI. A partir de allí, el país adecuó su ordenamiento jurídico con la aprobación de la Ley 23, publicada en abril de 2015, acompañada de una serie de planes de acción para subsanar las debilidades del sistema.
El texto legal que elaboró Panamá está directamente enfocado en la prevención de blanqueo de capitales y el financiamiento del terrorismo, además de sus respectivas reglamentaciones y el fortalecimiento de la Unidad de Análisis Financiero. Además, en abril de 2015 también se aprobó la Ley 18 que modificó el régimen de acciones la portador.
La calificación dada a Panamá por el GAFI, como una nación que no cooperaba en la lucha contra el blanqueo de capitales sólo empeoró la relación con los bancos corresponsales en el ámbito internacional, que es un instrumento indispensable para realizar operaciones internacionales de los bancos, y desde entonces el istmo perdió 21 líneas de corresponsalía.
“Con esta decisión, Panamá deja de estar en una posición de alto riesgo para hacer relaciones bancarias con bancos globales, serios”, declaró al diario La Prensala viceministra de Economía y Finanzas, Eyda Varela de Chinchilla.
La viceministra Varela precisó que en el caso de Panamá, la nación no se puede dar el lujo de que sus grandes entidades bancarias pierdan sus corresponsalía, pues este país es un reconocido en la región como un centro financiero, pero al mismo tiempo no posee un Banco Central y es un país dolarizado.
Indicó además que esta decisión del GAFI de sacar a Panamá de la lista gris implica se abrirán las puertas en la nación centroamericana para mayor número de inversiones extranjeras.
Fuente: La Prensa.