EnglishDudas y preguntas rondaban entre las personas que atravesaban las viejas puertas de Italcambio, una de las principales casas de cambio en Venezuela. Parecía que la norma de este miércoles fue entrar con expresión de confusión al lugar, mientras se miraba alrededor en búsqueda de la cola de turno; costumbre aprendida en supermercados y farmacias a la hora de ir a comprar algún artículo de primera necesidad.
Las dudas no resultaban extrañas. Desde hace 12 años los venezolanos no acuden a una casa de cambio para obtener divisas extranjeras debido al fuerte control cambiario establecido por el Gobierno del país desde 2003.
El trámite para obtener dólares solo podía hacerse a través de un engorroso mecanismo bancario hasta el pasado 18 de febrero. Fue este día cuando se puso en marcha el Sistema Marginal de Divisas (SIMADI), el cual le permite a las personas la compraventa limitada de monedas extranjeras en casas de cambio y bancos autorizados por el Gobierno.
Debido a las malas experiencias pasadas con anteriores mecanismos (CADIVI, SICAD I, SICAD II), los rumores han estado a la orden del día. Pasado el medio día de este miércoles, en Italcambio se percibía cierto nerviosismo. Las personas se ubicaban torpemente como podían en el lugar y los empleados de vez en cuando se hacían preguntas entre ellos para verificar requerimientos, trámites y pasos en la compra y venta de divisas.
“Normalmente no teníamos esta cantidad de gente. Hasta ahora solo tramitábamos remesas familiares y de viajes”, relató Gregorio Daboin, supervisor de Italcambio en el centro de Caracas, en uno de los pocos momentos en los que no era asediado por preguntas de los clientes.
Contra todo pronóstico, el mecanismo del SIMADI en las Casas de Cambio resulta bastante sencillo. Algunos usuarios entraban y salían de la agencia al momento, pero más eran los que se quedaban a esperar. Tras realizar las preguntas de rigor descubrían, muchos con asombro, que el único requerimiento que debían presentar era la copia de su carnet de identificación fiscal y su cédula para ser registrados en el sistema.
Para el cambio de divisas se debe realizar en la agencia un registro de usuario. Los más afortunados eran aquellos que habían realizado el trámite el día anterior, pues se limitaban a esperar unos cuantos minutos antes de ser atendidos.
Sin necesidad de presentar otros documentos, estos clientes podían comprar hasta US$200 en efectivo diario, con un límite de $2000 mensuales y $10.000 anuales. En caso de querer una transferencia, se les permitía la adquisición de hasta $300 por día. El único obstáculo en el camino es la comisión de la casa, del 3%, que se debe cancelar en bolívares.
Por otro lado, eran menos los oferentes de divisas. Estos, no alcanzaban a crear una cola, como los compradores. A ellos no se les cobraba ninguna comisión si llevaban las divisas en efectivo.
Así, el flujo de gente en Italcambio, en la céntrica avenida Urdaneta,era constante, entre los que buscaban vender, los que compraban y los curiosos que al descubrir los pocos requerimientos, se quedaban a esperar por su registro.
Las opiniones eran encontradas. Para algunos, el tramité no sumaba nada nuevo: “Esto está muy lento solo para inscribirse. Me aburrí. Me voy”, expresó Richard Monsalve, a la vez que salía de la agencia y algunos curiosos fuera del lugar expresaban incomodidad por la fila.
Para otros, la experiencia era satisfactoria: “A mí me ha ido bien”, indicó Liseth Gómez a un lado de la cola, mientras esperaba que su esposo adquiriera las divisas estadounidenses. “Me parece que es lo mejor que han hecho. En otras partes era engorroso”, opinó José Sánchez a la salida de Italcambio, e igualmente otras dos personas afirmaron que todo era muy rápido una vez que se hacía el registro.
“Hasta ahora todo se está desarrollado con normalidad. Ha asistido bastante gente”, explicó el supervisor. Durante el día, los clientes pudieron acceder al dólar por Bs. 172.
No obstante, tras cruzar las puertas de la agencia, y pisar el caos del centro caraqueño, el precio del dólar paralelo seguía en ascenso. Para finales de la tarde, la cuenta DolarToday informaba que la divisa estadounidense rondaba los Bs. 202. Dos días después, alcanza los Bs. 222.
Habrá que esperar más tiempo para comprobar si el SIMADI logrará cumplir el ansiado objetivo de desaparecer el mercado negro. Hasta ahora, solo ha logrado inflarlo.
Editado por Elisa Vásquez.