La semana pasada el presidente Juan Manuel Santos aprobó una ley que obliga a los empresarios a pagarle a sus trabajadores el recargo nocturno desde las nueve de la noche. Hasta ahora las empresas pagaban este recargo desde las diez p. m. La medida implica un incremento en los costos de producción que tienen los empresarios en el país.
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En general, esta decisión ha sido recibida con mucha alegría por la opinión pública y por los colombianos que creen que está bien obligar a los empresarios a pagar cierta cantidad a sus empleados. Y es que dando una mirada superficial, quien no conozca las cifras y no sepa mucho de economía, puede creer que este tipo de medidas ayuda a los más pobres y que es justo que quien trabaje de noche gane más.
Sin embargo, esta medida tiene efectos negativos mucho más profundos de lo que la mayoría de colombianos alcanzan a imaginar. El mismo Ministerio de Hacienda ha dicho que correr la hora para pagar el recargo nocturno, de las diez a las nueve, causará el despido de por lo menos 36.000 empleados.
Se ha hecho un cálculo aproximado de los colombianos que perderán su empleo por cuenta de esta ley, pero lo que no queda claro es, además de eso, cuántos empleos dejarán de crearse. En nuestra videocolumna de hoy hacemos un análisis de las consecuencias negativas que traerá esta nueva medida para los colombianos.
En la videocolumna del PanAm Post analizamos los últimos acontecimientos del mundo iberoamericano desde una óptica liberal. Es presentada por Vanesa Vallejo, economista, miembro del Movimiento Libertario colombiano y columnista del PanAm Post.