La torre de Donald Trump promete ser lo más lujoso y exclusivo de este famoso balneario de Suramérica, Punta del Este, a 140 kilómetros de Montevideo, la capital uruguaya.
En la entrada principal, lo primero que se lee es el anuncio “Welcome to the ultra exclusive luxury living”, mientras un guardia vestido de negro lo acompaña.
Este edificio cuenta con 26 pisos con 154 apartamentos y 2 penthouses. Por ahora, está construido solo el esqueleto gris en forma de cilindro.
A pesar de que el magnate aseguró que no haría ningún proyecto fuera de los Estados Unidos, esto no afecta a la Torre Trump en Uruguay porque le entregó el control a sus hijos. Además, las obras están avanzando y son muestra de que los proyectos del mandatario no dejan de ser atractivos para el mundo de los negocios.
Sin embargo, muchos aseguran que los trabajos van más lento de lo previsto.
En noviembre de 2012, Trump anunció la construcción de la torre. Las ventas comenzaron en marzo de 2013 y la obra como tal en octubre de 2014. En ese entonces, se prometió inaugurarla en octubre de 2017.
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Juan José Cugliandolo, el director general de la empresa que lleva adelante la torre, YY Development Group, indicó: “La entrega está prevista para fines del 2018. Estamos haciendo una torre con cuatro subsuelos frente al mar, y esto es algo que no existe en Punta del Este”.
Añadió: “Cuando hay que romper roca y entrar más de 15 metros hacia abajo, ocurren todos estos procesos. Estamos dentro de los plazos que nos hemos propuesto”.
Según el portal digital de El Nuevo Herald, en Uruguay existen varios casos de esqueletos de edificios que permanecen por décadas sin ser terminados, lo que limita a algunos potenciales clientes que quieran invertir en alguna obra.
La propietaria de una inmobiliaria en Montevideo y Punta del Este, New Home Propiedades, Talma Friedler, ya se encuentra vendiendo apartamentos de la Torre Trump y afirma que la lentitud en la construcción ya tiene preocupado a más de uno.
A pesar de ello, aseguró que no tiene dudas de que se va a terminar “y más ahora que es presidente de Estados Unidos”.
Esta gigantesca obra está ubicada en frente del océano Atlántico y muy cerca de la plaza.