
Según indica el diario salvadoreño La Prensa Gráfica, los grupos de autodefensa civil han surgido en El Salvador para combatir la violencia de las maras y pandillas en sus comunidades. En este momento piden ser reconocidos legalmente para poder ampliar sus acciones legalmente.
Uno de estos grupos está conformados por excombatientes durante el conflicto armado en el El Salvador (1980 – 1992) que residen en San Vicente, un departamento del interior de Guatemala. La comunidad recibe a sus visitantes con un versículo de la biblia, “lo que el hombre sembrase, eso cosechase”.
Estos excombatientes se dedican a patrullar el área donde viven para cuidar a su comunidad de 58 personas de la violencia de las maras. Hace tres años las maras comenzaron a frecuentar su comunidad, los habitantes reportan que les prohibieron cultos religiosos y otros tipos de celebraciones.
Dentro de los testimonios de los habitantes de la población se escuchan frases como: “A mí una vez me quisieron pegar porque no saludé a uno”, “A mí me pedían ‘renta’, pero no podía dar porque a penas saco para mi familia” o “A mí me mandaban a pedir con amenazas para el guaro”.
Los pandilleros cometieron asesinatos y los excombatientes decidieron poner en práctica lo que aprendieron durante la guerra civil y comenzaron a patrullar su comunidad en grupos de ocho personas.
Uno de los líderes armados, para intentar justificar su organización, expresa que:
“¿Usted cree que es justo que los que nacieron en la posguerra, vengan y le quieran quitar a nuestros hijos la paz por la que luchamos? […] Acá o nos mataban o los matábamos nosotros”.
Por su parte el alcalde de ese municipio cataloga a ese grupo como una coordinación entre las comunidades y las autoridades, pero no lo cataloga como un grupo de autodefensa.
Alfredo Hernández, alcalde de Tecoluca, un municipio de San Vicente (departamento ubicado en el centro de El Salvador con una población de 230.000 personas) le comentó a La Prensa Gráfica que:
“Entiendo que en el lugar fue instalado un grupo de tarea conjunta, Fuerza Armada y PNC, que en coordinación con las comunidades están trabajando por la seguridad y prevención de la violencia. La organización es un bastión de Tecoluca, y aunque (esos caseríos) no pertenecen a nuestro territorio, ellos la tienen; y si los esfuerzos de protección social son legales y en acuerdo con la autoridad, nos parece bien”.
Diputado apoya a grupos de autodefensas
El presidente de la Asamblea Legislativa, Guillermo Gallegos ha ayudado a grupos de autodefensas civiles que ejercen su actividad en La Paz, (departamento ubicado en el área centro-sur de El Salvador).
Gallegos comentó que:
“Efectivamente, la manera de legalizarlos, lo que yo he colaborado con ellos es ayudándoles en el trámite para que puedan sacar su licencia de portación de armas. He ayudado facilitando un aporte económico para que puedan comprar sus armas legalmente. Creo que en la medida que todo sea legal, que todo sea transparente, que todo sea en el marco de la ley, no hay ningún problema”.
Según un habitante de La Paz, los combatientes buscaron el apoyo institucional.
“Directamente hemos vivido una vida bastante cruel por la delincuencia. Cuando nosotros nos vimos bien preocupados por la ‘renta’, que nos querían quitar a nuestros hijos los pandilleros, lo que hicimos fue ponernos de acuerdo en la comunidad a organizarnos. Así nos organizamos con palos, con corvos y ahí hemos estado turnándonos en las noches”.
A lo que Gallegos añadió,
“Con esto no trato de tomar atribuciones que le corresponden a la PNC o el Ejército, eso yo lo tengo bien claro que es el Estado que debe garantizar la seguridad, pero desgraciadamente no tenemos condiciones para que haya policías en cada uno de los territorios o de los lugares donde hay mareros y por eso es necesario que la comunidad se organice legalmente y que pueda funcionar de manera coordinada, supervisada por la PNC, Ejército y la misma Fiscalía”.
El funcionario presentó el 27 abril una iniciativa en la Asamblea Legislativa para legalizar estos grupos, además considera que las autodefensas no son delincuentes.
El legislador naranja presentó el pasado 27 de abril una iniciativa en la Asamblea Legislativa para la legalización de los grupos armados contra las pandillas. “No son grupos de limpieza social, ellos no salen en la noche a buscar mareros casa por casa”, dijo Gallegos.
Opiniones encontradas
Diferentes políticos opinan que los grupos de autodefensa civiles pueden paso a exterminio fuera de la ley y a sicarios.
Mauricio Ramírez Landaverde, ministro de seguridad opina que los ciudadanos pueden adquirir armas bajo los parámetros que estipula la ley, pero que no pueden establecerse en tareas de seguridad.
Por su parte el ministro de Defensa, David Munguía Payés expresó que:
“no hay que confundir estos grupos de autodefensa con los grupos de limpieza social, son dos cosas totalmente diferentes. Estamos totalmente en desacuerdo con los grupos de limpieza social y vamos a perseguirlos. Los grupos de autodefensa que colaboran con las autoridades es un tema que todavía lo estamos discutiendo en el gabinete del más alto nivel. No hay una posición clara de parte nuestra, si vamos a apoyar o no a estos grupos. Obviamente, la ciudadanía tiene derecho a defenderse”.
Howard Cotto, director de la Policía Nacional Civil, considera que los grupos de autodefensa deben de estar regulados bajo la ley.