
Luego de la entrega de resultados del plebiscito opositor contra la Asamblea Constituyente de Maduro, el régimen de Maduro y sus partidarios han criticado el número de participantes de dicha consulta. Jorge Rodríguez, jefe de Propaganda del Comando de Campaña por la Asamblea Constituyente, cuestionó las cifras del plebiscito. Según Rodríguez, el número de votantes fue”pobre”. En el PanAm Post analizamos las cifras del plebiscito contra la Constituyente de Maduro.
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El contexto del plebiscito
La oposición venezolana ha concentrado sus esfuerzos en buscar una salida democrática para la grave crisis que vive el país. Uno de los mecanismos utilizados por la oposición fue promover la revocatorio al mandato de Nicolás Maduro. Aunque la figura de la revocatorio aparece en la Constitución chavista de 1999, la dictadura bolivariana centró sus esfuerzos en evitarla a toda costa.
En 2016, la oposición comenzó con el proceso legal para convocar a la revocatorio. Sin embargo, el Consejo Nacional Electoral (CNE) y el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), ambos dominados por chavistas, cambiaron las reglas para esta convocatoria. Finalmente, el CNE canceló el proceso de llamado a revocatoria del mandato. A pesar de la oposición de importantes juristas a la Asamblea Constituyente, el CNE ha colaborado activamente a la iniciativa del dictador venezolano.
Estas acciones contribuyeron a que la oposición venezolana profundizara su desconfianza hacia las instituciones del régimen. Es así como surge la propuesta de realizar el plebiscito en contra de la Constituyente de Maduro.
Invocando el artículo 71 de la Constitución venezolana, la Asamblea Nacional, órgano legislativo venezolano, promovió la creación de un “referendo consultivo”. Tanto el CNE como el TSJ se opusieron a su ejecución.
La dictadura castiga a quienes apoyan el plebiscito
Debido a la politización de la justicia en Venezuela, las iniciativas de la oposición resultan castigadas por las instituciones judiciales y electorales. El plebiscito opositor contra la Constituyente no fue la excepción. Para Tibisay Lucena, rectora del CNE, el plebiscito era un “acto de agitación política”.
Canales de televisión al servicio del PSUV como Telesur y VTV aseguraron que el plebiscito era una estrategia del “fascismo y nazismo”. La oficial Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) ordenó a medios no llamar “consulta popular” a la actividad electoral. También canales de gobiernos cercanos a la dictadura venezolana como Russia Today (del régimen ruso), Hispantv (de la teocracia iraní) y Granma (de la dictadura cubana) atacaron el plebiscito venezolano.
El dictador Nicolás Maduro, sus ministros y aliados trataron de impedir la consulta de todas las formas posibles. El político chavista Pedro Carreño introdujo una solicitud ante el TSJ para detener el plebiscito. La excanciller Delcy Rodríguez, así como el mismo Maduro, aseguraron que el plebiscito era una “consulta interna de la oposición” y la calificaron de ilegal.
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Las amenazas del chavismo: más que palabras
Pero las acciones del gobierno chavista contra el plebiscito opositor fueron más allá de las palabras. Como lo reportó el PanAm Post, el Estado venezolano, al servicio del PSUV, llegó a chantajear a los más vulnerables con quitarle alimentos a aquellos venezolanos que apoyasen el plebiscito. Pablo Cortesía, dirigente comunitario en La Llanada (Cumaná), aseguró que varias familias de su región fueron amenazadas con perder las bolsas de comida de los Comité Local de Abastecimiento y Producción (CLAP) si participaban en la consulta opositora.
Pero no sólo el gobierno venezolano agredió a quienes respaldaron el plebiscito. Los colectivos armados, paramilitares chavistas, amenazaron con “prohibir” la consulta venezolana. Las amenazas de estos grupos criminales se convirtieron en acciones violentas durante el proceso electoral. Los paramilitares del chavismo fueron responsables por varios ataques a los votantes en diferentes puntos del país.
En Catia, municipio Libertador, una persona fue asesinada por los colectivos armados. Tres personas más fueron heridas. Caraota Digital capta el momento en el que los paramilitares irrumpen violentamente en contra de partidarios de la consulta en Catia. Varios periodistas de ese medio fueron agredidos por las bandas chavistas.
Las dificultades logísticas de la oposición
Debido al boicot del CNE al plebiscito, el chavismo no ofreció la logística necesaria para la consulta. De esta forma, los partidarios de la consulta instalaron 14.800 mesas electorales. Normalmente, el CNE instala 45.000 mesas en todo el país. Este problema causó que muchos ciudadanos debieran hacer largas filas y esperar durante varios minutos para votar.
Aunque el régimen y sus instituciones aliadas intentaron boicotear el proceso electoral, miembros de la sociedad civil ayudaron con el proceso. Por ejemplo, los rectores de universidades se convirtieron en garantes de la consulta popular.
Analizando las cifras de la consulta
A pesar de las amenazas legales y extralegales, la consulta logró 7.535.259 votos. Sectores cercanos al chavismo consideraron que el número de votos obtenidos en la consulta era bajo. Incluso ciertos sectores de la oposición se sintieron desanimados por el resultado. Sin embargo, es necesario entender las cifras en contexto.
Si bien es cierto que el padrón electoral de Venezuela es de 19.504.106 votantes, la abstención electoral es siempre alta. En la elección parlamentaria de 2015 votaron unos 14.385.349 ciudadanos. Durante esa misma elección, la oposición obtuvo 7.726.066 votos y el chavismo 5.622.844. Es decir, más venezolanos votaron en el plebiscito de 2017 que aquellos que respaldaron al chavismo en las parlamentarias de 2015, 2010 ó 2005.
Para la elección presidencial de 2013, Nicolás Maduro habría obtenido 7.587.579 votos y Enrique Capriles 7.363.980. Por lo tanto, el número de votantes del plebiscito opositor de 2017 superó al número de partidarios del chavismo en las presidenciales de 2013. La cifra de votantes el pasado domingo también superó por casi dos millones al número de votantes del chavismo en la elección parlamentaria de 2010. También vale la pena recordar que el plebiscito del domingo obtuvo el doble de votos que la elección parlamentaria de 2005. En ninguna de esas ocasiones el chavismo criticó el número de votos. El plebiscito contra la Asamblea de Maduro también superó en número de votantes a la Asamblea Constituyente de Chávez de 1999.
El futuro de Venezuela
Los venezolanos han dado un ejemplo de coraje. A pesar de la maquinaria estatal y paraestatal del chavismo, millones de venezolanos votaron contra la dictadura. Como resultado de esta determinación, más de siete millones de venezolanos expresaron su rechazo a la inseguridad, desabastecimiento y autoritarismo. En esta consulta participaron más venezolanos que en muchas de las elecciones convocadas por el régimen.
A pesar de lo esperanzador de estas cifras, la lucha contra el autoritarismo continúa en Venezuela. La oposición venezolana no puede bajar la guardia. Las movilizaciones ciudadanas deben continuar. La dictadura sigue en pie.