Hoy, 21 de junio, en Argentina comienza el “día de la independencia tributaria”. Esto quiere decir que desde enero hasta hoy, una familia tipo sólo trabajó para pagar sus impuestos en el país del sur, donde se pagan más impuestos que en Estados Unidos, Brasil o Inglaterra, el país con más presión tributaria del mundo entero: otra de las consecuencias de la “década K”.
Este informe mide la cantidad de días al año que debe trabajar una familia promedio con salario para poder pagar los infinitos impuestos.
El Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), autor de dicho informe, afirmó que “es un indicador comúnmente utilizado a nivel mundial para ilustrar el nivel de carga tributaria que existe en un país, y considera la cantidad de días hipotéticos que debe destinar un individuo para el pago de los diferentes impuestos al Estado”.
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Según los resultados del informe, un trabajador promedio en Argentina debe trabajar en 2017 entre 174 y 206 días, según sus ingresos, para cumplir con las obligaciones tributarias de los tres niveles del gobierno (nacional, provincial y municipal).
En este sentido, “el valor se calcula aplicando proporcionalmente un indicador de carga tributaria sobre el año calendario, asumiendo que desde el 1º de enero se comienza a trabajar para el Estado y obteniendo la fecha a partir de la cual un ciudadano termina de pagar impuestos y comienza a percibir ingresos para sí mismo”. Este análisis incluye todo tipo de impuestos (directos e indirectos, nacionales, provinciales y municipales).
No caben dudas de que la alta presión tributaria que sufren los argentinos es otra de las herencias de la época kirchnerista que azotó fuertemente a nuestro país, maquillando cifras y generando gastos con una inmensa corrupción.
En sentido comparativo, en 2017 y por segundo año consecutivo, puede observarse una reducción en la cantidad de días que se necesita trabajar para pagar impuestos. Según aclara el informe del Iaraf, “este es el segundo año consecutivo en que se observa una reducción en la cantidad de días necesarios para pagar los impuestos. El recorte llega hasta 28 días respecto del plazo verificado en 2015”.
En 2016 fue el primer año que se bajaron los impuestos después de doce años de subida. Se eliminaron los impuestos al comercio exterior, también hubo una rebaja en el Impuesto a las Ganancias de las personas y además la presencia de la Ley Pyme. De este modo, Argentina comenzó a desandar un proceso de descenso en la presión tributaria por primera vez en muchos años.