Por: Armando Regil Velasco
“Cuando la justicia se politiza, es el fin del Estado de Derecho” afirmó el periodista cubano Carlos Alberto Montaner tras la injusta detención del expresidente y senador de Colombia Álvaro Uribe Vélez. “Uribe ha sido infinitamente peor tratado por el poder judicial de su país que los narcoterroristas de las FARC” reconoce Montaner.
La batalla que hoy se da en Colombia no es solamente la de unos narcoguerrilleros contra un expresidente y senador, es la batalla por la preservación de la libertad, la justicia y la democracia en todo el hemisferio. Si el experimento le resulta exitoso a la izquierda socialista bolivariana y a sus aliados, el mal precedente puede generar un efecto de contagio que sería mortal para otras democracias en el continente.
El abogado Carlos Sánchez Berzain lo ha explicado claramente: “El socialismo del siglo XXI o castrochavismo ha demostrado que una parte fundamental de su metodología es la judicialización de la persecución política. Procesos judiciales para amedrentar, neutralizar, asesinar la reputación, apresar, condenar y tratar de eliminar a quienes consideran sus enemigos.”
Como afirma Héctor Schamis, profesor de la Universidad de Georgetown: “La raíz de esta crisis se encuentra en un acuerdo de paz mal concebido, pobremente diseñado e ilegítimamente implementado y que tuvo en Uribe a su principal opositor. La concepción del mismo implicó la continuidad y estabilidad de Maduro en el poder, quien fue garante de las negociaciones.”
Son evidentes los lazos de la izquierda socialista bolivariana con distintos grupos criminales que, ante la imposibilidad de acceder al poder electoralmente, lo hacen infiltrando las instituciones de justicia para avanzar sus agendas hasta someterlas completamente a sus intereses. De ahí la importancia de blindar la justicia para impedir que la agenda destructora del Foro de Sao Paulo, hoy Grupo de Puebla, siga avanzando y destruyendo las democracias en occidente.
Desde LEAD4, ciudadanos de distintos países expresamos, a través de un Manifiesto, la creación de una coalición global para respaldar a Álvaro Uribe Vélez, exigiendo de manera inmediata, el respeto al debido proceso y a la presunción de inocencia para que pueda defenderse en libertad.
Somos millones quienes reconocemos en Álvaro Uribe a un líder sobresaliente por su heroísmo y congruencia en la lucha por la libertad, la justicia y la paz en Colombia y en todo el hemisferio. Hacemos un llamado para acompañar, desde la comunidad internacional, el proceso para que tenga todas las garantías que exige la democracia.
Voces muy importantes se suman en todo el mundo a este llamado. Hace unos días, el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, afirmó: “Al estar el expresidente Álvaro Uribe bajo arresto domiciliario, nos unimos a todas las voces amantes de la libertad alrededor del mundo para llamar a los funcionarios colombianos a que dejen que este héroe, quien ha recibido la Medalla Presidencial de la Libertad, se defienda como un hombre libre.”
Veintiún expresidentes de América Latina y España que forman parte de la Inciativa Democrática de España y las Américas (IDEA) sumaron sus voces en una declaración para hacer pública su solidaridad con Álvaro Uribe. “Conscientes, al efecto, que la democracia y el Estado de Derecho quedan gravemente comprometidos cuando se ideologizan o manipulan la garantía y tutela universal de los derechos humanos, alertamos a la opinión pública y a los gobiernos libres de Occidente sobre una deriva global que ha de frenarse de manera responsable y oportuna, y que busca comprometer los activos de su patrimonio intelectual.”
Desde Venezuela, María Corina Machado líder de la oposición, ha sido contundente: “El encarcelamiento de Álvaro Uribe es parte de esta operación de destrucción de Colombia y Venezuela. En Venezuela se utilizó la justicia para cobrarle una venganza al presidente Carlos Andrés Pérez, se acabó con la institucionalidad y se desataron los demonios que trajeron a Chávez y a estos criminales. El encarcelamiento del presidente Uribe es un salto al abismo. Esta es una operación de Maduro que quiere derrocar al Presidente Iván Duque de Colombia”.
En España, Pablo Casado, Presidente del Partido Popular ha dejado claro que el legado del presidente Uribe trasciende el continente americano: “Reconozco la labor que hizo para acabar con el narcoterrorismo para recuperar la Libertad y prosperidad de los colombianos. Gracias a él pudimos colaborar en la lucha antiterrorista contra ETA.”
Conociendo más a fondo el modus operandi de los castrochavistas disfrazados de demócratas, México debe estar en alerta máxima pues tanto la defensa del Instituto Nacional Electoral (INE) como de la Suprema Corte de Justicia (SCJN), constituyen dos batallas para preservar nuestras libertades y salvar nuestra frágil democracia. Cuando la justicia llega a estar infiltrada y secuestrada por criminales como en Colombia y Venezuela, no hay Estado de Derecho que sobreviva.
Deseo que, muy pronto, Álvaro Uribe Vélez goce de plena Libertad. Expresemos y multipliquemos nuestra solidaridad uniéndonos a esta coalición global utilizando los hashtags: #SiempreConAlvaroUribe y #CoalicionParaDefenderaUribe. Hoy por Colombia y Venezuela, mañana por el resto de América Latina. Esta batalla es de todos.
Armando Regil Velasco, nació en Ciudad de México, estudió Economía y Políticas Públicas en Georgetown University. Es presidente de i2Co: School of Transformative Leadership, CEO de Data Disrupt 4ST y de LEAD4. Miembro de la red de expertos del World Economic Forum y de Geopolitical Intelligence Services fundado por el Príncipe Michael de Liechtenstein. Autor de 3 libros y conferencista internacional.