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El que hasta hace cuatro años fuera un grupo criminal poco conocido, se ha vuelto una amenaza para México y para Joaquín “El Chapo” Guzmán lo que se ha traducido en una nueva oleada de violencia y corrupción dentro de las instituciones del país azteca.
Este cartel bajo el liderazgo del expolicía Nemesio “El Mencho” Oseguera, fue forjando un imperio mientras derribaba a sus enemigos más débiles, llegando a crecer de manera rápida y demostrando que tan rápido puede cambiar de manos el poder del narcotráfico en México.
Pero los tentáculos de esta organización criminal no se limitan al territorio mexicano, sino que van desde China hasta el norte de África y Europa del este dejando una estela de sangre que ha echado por tierra los intentos del presidente Enrique Peña Nieto por restaurar la paz y la ley en ese país.
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Una muestra de esto fueron los 3.800 muertos entre los meses de julio y agosto, cuando Jalisco Nueva Generación resurgió tomando el lugar del cártel de Sinaloa que fuera liderado por el Chapo Guzmán.
Dentro de las tácticas que este cartel ha utilizado para crecer está el soborno y ataques a las fuerzas de seguridad, técnicas que aprendieron del cartel de Guzmán Loera mientras debilitaban y arrebataban rutas del tráfico de droga a sus rivales.
Policías en su nómina de pago
La agencia de noticias Reuters entrevistó a más de una decena de policías en condición de servicio y retiro que explicaron el nivel de colusión que hay dentro de esta institución con el cartel Jalisco Nueva Generación.”La gente dejó de confiar en la policía. La gente creía y percibía que la policía del estado (de Jalisco) servía a un grupo delictivo” dijo Eduardo Almaguer, fiscal general del estado de Jalisco.
Por otro lado, un miembro del cartel que se encuentra en prisión, declaró que llegaron a tener a la mitad de la policía municipal de Jalisco en su nómina mensual con pagos que iban desde US$52.00 a US$2.600 dependiendo el rango.
Pero el costo de no ceder a las presiones de la organización criminal son altos, como sucedió en el año 2015 cuando en seis semanas el cartel mató a más de dos docenas de policías y derribo de un helicóptero del Ejército cuando intentaron capturar a Oseguera, líder del Jalisco Nueva Generación.
Fuente: Reuters
