El presidente de Bolivia, Evo Morales, anuló un contrato por “errores administrativos”, con dos empresas europeas que construirían una planta petroquímica.
La anulación del contrato se realiza en medio de una denuncia de parte del senador opositor, Oscar Ortiz, por presunta corrupción. El caso le costó el cargo al presidente de la estatal petrolera boliviana, Guillermo Achá.
A pesar de que no se explicaron los errores que fueron detectados, señalaron que los contratos, hasta que sean firmados, pueden ser revisados y anulados si no cumplen con los requisitos.
“Entre la adjudicación y la firma de contrato es normal y común anular el contrato. No se ha firmado el contrato que se adjudicó. En el proceso de revisión instruido por el presidente de Yacimiento Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), se ha procedido a la anulación de la adjudicación”, indicó Luis Sánchez, ministro de Hidrocarburos.
“Una muestra de transparencia es que se hayan detectado errores administrativos que frenaron la adjudicación para evitar daños económicos”, afirmó el ministro.
La construcción de la planta de propileno y polipropileno con la empresa italiana Tecnimont y su socia española Técnicas Reunidas, iba a ser la mayor apuesta del presidente para industrializar el gas natural, el cual es la principal riqueza del país.
“Este iba a ser el contrato más grande del Estado, USD $2.000 millones sin licitación, sin publicaciones, sin haber hecho un proceso con competencia, transparente y abierto”, dijo Ortiz, quien solicitó que se hiciera un informe oral sobre este caso.
Es necesario “que se revise no solo la parte administrativa, sino el conjunto de este proyecto; y aunque el Gobierno no lo quiere aceptar o tal vez disimular hay que abrir una investigación sobre este proceso de contratación, porque se trata de más de 2.000 millones de dólares que no se convocaron públicamente y que se realizaron invitaciones directamente por la gestión”, comentó el senador. “Voy a seguir fiscalizando”, afirmó, al mismo tiempo en que consideró positiva la anulación del contrato, ya que a su juicio, se evitó un presunto caso de corrupción.
Ortiz había solicitado investigar la razón de que la empresa italiana se hubiese adjudicado tres contratos, el estudio de ingeniería conceptual, el servicio de apoyo estratégico y el proyecto de ingeniería y construcción de la planta de propileno y polipropileno.
Fuentes: El Nuevo Herald; Los Tiempos.