Este sábado 29 de julio, tras lanzar un misil intercontinental que impactó en el Mar de Japón, el líder norcoreano Kim Jong-un aseguró que todo Estados Unidos está al alcance de su rango de ataque.
El lanzamiento del misil tenía como objetivo enviar una “severa advertencia” a la Casa Blanca, según indicó el régimen de Pyongyang en una nota.
“La última prueba demostró la fiabilidad de nuestro misil intercontinental y nuestra capacidad para lanzarlo de manera sorpresiva desde cualquier lugar y en cualquier momento”, advierte el comunicado. “Todo el territorio continental de Estados Unidos está dentro de nuestro rango de ataque”, dijo el líder norcoreano.
Por su parte, Estados Unidos condenó ese ensayo y manifestó que “rechaza el argumento del régimen sobre que estas pruebas —y estas armas— garantizan la seguridad de Corea del Norte”.
El presidente norteamericano Donald Trump, ya ha asegurado que tomará “todas las medidas necesarias” para proteger a su país y a los aliados en la región. Asimismo, ha calificado de “temeraria y peligrosa” la acción del régimen norcoreano. “Al amenazar al mundo, estas armas y pruebas aíslan todavía más a Corea del Norte, debilitan su economía y sacrifican a su pueblo”.
China también reaccionó al lanzamiento del misil condenando lo sucedido y llamando a las partes a la moderación. “China se opone a las violaciones por Corea del Norte de las resoluciones de la ONU (…) Al mismo tiempo, espera que todas las partes implicadas den muestras de prudencia y eviten agudizar las tensiones”, señala un comunicado del ministerio de Relaciones Exteriores.
El lanzamiento del misil Hwasong-14 voló 998 kilómetros durante unos 47 minutos y alcanzó una altitud máxima de 3.724,9 kilómetros antes de caer en el Mar de Japón (llamado “Mar del Este” en las dos Coreas).
Fuentes: Agence France Presse, La Vanguardia, El País, El Telegrafo.