El polémico libro del periodista Michael Wolff, “Fuego y furia: dentro de la Casa Blanca de Trump”, deja al descubierto problemas internos del Gobierno estadounidense y cuestiona la salud mental del mandatario.
El libro está basado en más de 200 entrevistas con amigos personales de Trump y personas que trabajan o trabajaron con él, y relata cómo este ascendió a la Casa Blanca y cómo fueron sus primeros meses de Gobierno.
“Le preguntas a la gente, te acercas lo más que puedes al tema, entrevistas a las personas que estuvieron al tanto de lo que pasó, entrevistas a otros que supieron del asunto, llegas a conocer las circunstancias tan bien como cualquier y entonces lo reportas”, señaló Wolff.
El libro, que se ha convertido en un bestseller a horas de haber salido a la vemta, podría tener contenido que acabe con el período republicano en la Casa Blanca, señaló Michael Wolff en una entrevista.
Revelaciones del libro
“Fuego y Furia” expone detalles de un Gobierno dividido en el que Steven Bannon, exjefe de estrategia de Trump, tilda de “traidor” y “antipatriota” al hijo del presidente (Donald Trump Jr.) y a otros miembros de la campaña presidencial. Así lo expuso Bannon sobre la reunión con los rusos.
“Tres altos tipos de la campaña (Donald Junior, el yerno Jared Kushner y el jefe de campaña Paul Manafort) pensaron que era una buena idea reunirse con un Gobierno extranjero en la torre Trump (…) No tenían ni abogados. Aún ninguno piensa que eso no es una traición, o algo poco patriótico o simplemente una mierda, y yo creo que fue las tres cosas, uno debería haber llamado inmediatamente al FBI”.
Asimismo, el libro revela aspectos personales de Trump como su miedo a ser envenenado, razón por la que “le gusta comer en McDonald’s: nadie sabe que va a ir y la comida es preparada sin esa información”.
De acuerdo con el periodista, Trump es un hombre “errático” que come hamburguesas con papas fritas encerrado en un cuarto mientras se queja con sus amigos por el maltrato de los medios.
Basándose en las entrevistas, Wolff califica a Trump como un “ignorante”, ya que no tiene conocimiento sobre los detalles de sus iniciativas, ni se interesa por ellos.
Personajes como Rupert Murdoch, dueño de Fox, incluso tildaron a Trump de “idiota”, y otros, como Katie Walsh, segunda abordo del gabinete, aseguran que hablar con Trump es como hablar con un “niño”.
“Todos lo han descrito de la misma manera, dicen que es como un niño, lo que quieren decir es que necesita satisfacción inmediata, todo gira en torno a él”, afirmó el periodista asegurando que todos “cuestionan su capacidad para gobernar“.
Wolff también expone que Trump nunca pensó ganar la presidencia y que, de hecho, no quería hacerlo; su objetivo solo era potenciar su marca.
Según el bestseller, cuando Trump se enteró de que ganó las elecciones, no lo podía creer, “parecía que había visto un fantasma” y “Melania (ahora primera dama estadounidense) estaba en lágrimas, que no eran precisamente de alegría”.
En cuanto a la capacidad mental del mandatario, el autor de “Fuego y Furia” cuenta que cuando inició la campaña presidencial, el auxiliar Sam Nunberg fue enviado a explicarle la Constitución a Trump y este afirmó que solo pudo llegar “hasta la Cuarta Enmienda antes de que empezara a tirarse de los labios con los dedos mientras hacía girar los ojo”.
“Es necesario tener en cuenta que es un hombre que no lee, un hombre que no escucha”, dijo.
Trump reacciona
Ante la publicación del polémico libro y la recepción que este ha tenido, Trump reaccionó a través de su cuenta oficial de Twitter calificándose a sí mismo como un “genio muy estable”.
“Pasé de ser un MUY exitoso hombre de negocios, a estrella top de TV… a presidente de Estados Unidos (en mi primer intento). Pienso que eso calificaría no como listo, sino como genio… y un genio muy estable en eso”, escribió.
El mandatario aseguró que las historias del libro son falsas, y que “Michael Wolff es un completo perdedor”.
“Usó al Descuidado Steve Bannon, que lloró y rogó por su empleo cuando lo despidieron. Ahora al Descuidado Steve lo han abandonado casi todos, como un perro. ¡Una lástima!”, dijo.
….Actually, throughout my life, my two greatest assets have been mental stability and being, like, really smart. Crooked Hillary Clinton also played these cards very hard and, as everyone knows, went down in flames. I went from VERY successful businessman, to top T.V. Star…..
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) January 6, 2018
….to President of the United States (on my first try). I think that would qualify as not smart, but genius….and a very stable genius at that!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) January 6, 2018
Según Trump, las historias de Wolff fueron inventadas para vender un libro “realmente aburrido”. Por su parte, Wolff asegura que los comentarios de Trump, contrario a perjudicarlo, está haciendo que las ventas del libro sigan en aumento, además de “ayudarlo a demostrar lo que allí dice”. “Es extraordinario que el presidente de EE. UU. esté intentado frenar la publicación de un libro. Eso nunca había sucedido”, comentó.
Trump preparaba censura contra el libro
De acuerdo con el medio DW, los abogados de Trump buscaban censurar el libro “Fuego y Furia”, e incluso preparaban una demanda por difamación para lograrlo. Sin embargo, ante los intentos del mandatario, Michael Wolff decidió adelantar el lanzamiento del libro y así evitar que el libro fuese censurado.
Importancia del Libro
La publicación de este libro y de todos los detalles personales y profesionales del presidente podrían generar dudas sobre la incapacidad de Trump para ocupar el cargo, lo que podría dar paso a que su gabinete y el vicepresidente pongan en marcha un proceso de destitución en su contra, basándose en la enmienda 25 de la Constitución de Estados Unidos, que señala que de considerarse a un presidente “incapaz de ejercer los derechos y obligaciones de su cargo”, el vicepresidente tomaría el puesto.
Hasta ahora algunos han sugerido que Trump puede tener síntomas que apuntarían al trastorno narcisista de la personalidad (TNP), según BBC. Sin embargo, aún no hay evidencia real de que el presidente tenga problemas mentales o incapacidad para ejercer su cargo.