La Organización de Naciones Unidas (ONU) ha jugado un papel importante en la historia de los diferentes países del mundo, y esta semana lo que ocurra dentro de la organización podría ayudar a definir el rumbo de la crisis sociopolítica que atraviesa Nicaragua.
En los días venideros no solo se espera un a importante reunión en el Consejo de Seguridad que podría elevar la discusión sobre el país a la instancia de mayor nivel en Naciones Unidas; sino que, además, Michelle Bachelet, expresidente de Chile, iniciará su mandato como alta comisionada para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, y su actitud ante la crisis podría ser vital para Nicaragua.
Arranca una semana importantísima!
-Sesión del Consejo de Seguridad de @ONU_es
–@mbachelet nueva jefa de @OACNUDH
-Senado de USA vuelve a sesiones y debatirán la Nica Act y Magnitsky para Nicaragua
–@CP_OEA se reúne para tratar el tema de migración en Venezuela#SOSNicaragua— Hans Lawrence (@hawrence_) September 3, 2018
Reunión en el Consejo de Seguridad de la ONU
La reunión en la que se abordará la terrible situación del país centroamericano en el Consejo de Seguridad está prevista para el próximo 5 de septiembre; lo que ubicaría a esa nación “no solo como un problema regional sino de carácter global”, señaló José Miguel Vivanco, director de la División de las Américas de Human Rights Watch (HRW).
“El que un país como Nicaragua llegue al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas te aseguro que debe tener tanto a Ortega, como a la señora (Rosario) Murillo probablemente sin dormir, porque estamos hablando de palabras mayores. El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas no se ocupa de cualquier caso, sino de casos extremos a nivel global que llegan a ese organismo, estamos hablando de un cuadro de violaciones de los derechos fundamentales que amenazan la paz, la seguridad ante una circunstancia extrema”, explicó el experto.
Para que el caso llegue a este Consejo se necesita aprobación de nueve de los 15 miembros, votos que según Vivanco ya están definidos.
Una vez se discuta la crisis, el Consejo de Derechos Humanos adoptaría una resolución sobre lo que pasa en Nicaragua, lo que podría dar paso a un conjunto de importantes sanciones internacionales tanto económicas como políticas.
Importancia para Nicaragua el nombramiento de Bachelet
La presidenta de Chile asumió el puesto como Alta Comisionada de Derechos Humanos para la ONU el pasado sábado 1 de septiembre y ya hay escepticismo sobre cómo ejercerá su cargo y la manera en que esto podría afectar a Nicaragua.
Damos la bienvenida a nuestra nueva Alta Comisionada de @UNHumanRights, Michelle Bachelet. Es la 7ma. persona que ocupa el cargo, desde la creación del @OACNUDH
Más información: https://t.co/xA5elKilTn #StandUp4HumanRights pic.twitter.com/4TkEzMnY5P
— OACNUDH (@OACNUDH) September 1, 2018
El diario nicaragüense La Prensa señala que hasta ahora Bachelet ha dado evidencias que ha sido o es “amiga de los dictadores totalitarios Raúl Castro, Nicolás Maduro y el mismo Daniel Ortega”, lo que podría dificultar que se ejerza mayor presión ante los Gobiernos que precisamente violan los derechos humanos.
Según el director de la División de las Américas de Human Rights Watch (HRW), el caso de Nicaragua será precisamente la “primera prueba de fuego” que tendrá Bachelet, por lo que ahora se deberá esperar a ver su postura al respecto.
Cabe recordar que el pasado sábado 1 de septiembre, los representantes de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), abandonaron Nicaragua tras ser expulsados por el régimen de Daniel Ortega luego de haber publicado un duro informe en el que señalaron a Ortega como represor.
El informe de @OACNUDH asegura que la represión y las represalias en #Nicaragua están forzando a los ciudadanos a esconderse o huir del país.
En este hilo detallamos las claves ?— Noticias ONU (@NoticiasONU) August 29, 2018
Se espera que esta semana Bachelet, como alta funcionaria de Derechos Humanos en Naciones Unidas, se pronuncie al respecto.
Bachelet debe dejar claro que “el deber de su oficina es estar en Nicaragua protegiendo los derechos fundamentales, investigando abusos, fiscalizando la conducta de los agentes del Estado y además que le garanticen plena cooperación para que pueda entrar a las prisiones, observar juicios de presos políticos que se están llevando sin ninguna garantía”, indicó Vivanco.
La prueba de Ortega para Bachelet
Según Vivanco, la decisión de Ortega de expulsar a los representantes de la OACNUDH del país es precisamente una prueba para evaluar el tipo de gestión que tendrá Bachelet.
La decisión es “para ver si (Bachelet) se atreve a exigir, insistir, reclamar públicamente como lo hizo el anterior alto comisionado”, opinó.
Para el director de HRW, los “Ortega Murillo apuestan a que Bachelet impondrá una tónica distinta, y ellos poder evadir sus obligaciones en materia de derechos humanos”.