Una de las características del kirchnerismo durante sus 12 años de gobierno fue el impúdico uso del aparato del Estado con finalidad partidaria.
Al perder el control del Poder Ejecutivo Nacional estas cuestionables prácticas quedaron limitadas a las intendencias donde el peronismo ha podido sobrevivir. Recordemos que hace muy poco dos intendentes bautizaron con sus nombres las ambulancias y patrulleros policiales en sus distritos.
Probablemente la peor manifestación de este comportamiento fascista se vio ayer cuando el intendente de la ciudad de Avellaneda, Jorge Ferraresi, utilizó los carteles luminosos de tránsito para hacer propaganda partidaria para su jefa política, Cristina Fernández de Kirchner.
Durante la presentación de la expresidente en el estadio de Aresenal de Sarandí los carteles electrónicos, que deberían señalar cuestiones relativas al tránsito y la seguridad, presentaban la leyenda “¡VUELVE!”.
- Lea más: Demagogia y manipulación: Cristina Kirchner vuelve a la política con las mismas recetas fracasadas
La expresidente, ante un escenario de peronismo dividido, encontró en Ferraresi un aliado leal que puso siempre la estructura y recursos del municipio a disposición política de la exmandataria.
Ferraresi fue el primero que reconoció públicamente que Fernández de Kirchner sería candidata a senadora, aunque hasta el momento la candidatura no ha sido oficializada.