
El disidente cubano Guillermo Fariñas cumple este lunes 15 de agosto, 26 días en huelga de hambre; protesta que inició con el fin de rechazar la represión del régimen de Raúl Castro y exigir que se respeten los derechos humanos en la isla.
Aunque Fariñas se mantiene estable, su salud cada día se deteriora más; según sus amigos y familiares enfrenta síntomas de decaimiento, somnolencia y algunos dolores.
“Tiene muchos dolores en los riñones, y en las últimas cuarenta y ocho horas ha orinado muy poco”, dijo su amigo Jorge Luis Artiles, quien aseguró que una doctora sigue su evolución.
Fariñas, quien fue merecedor del Premio Sajarov a la Libertad de Expresión en 2010, inició la huelga de hambre el pasado 20 de julio, luego de recibir maltratos físicos por parte de la policía en la ciudad de Santa Clara, Villa Clara en Cuba.
Al inicio de la huelga, Fariñas Hernández planteó tres exigencias a Raúl Castro: el cese de los atropellos a los disidentes, que un funcionario se reúna con opositores cubanos, que el compromiso sea publicado en la prensa oficial y que el Gobierno deje de acosar a los cuentapropistas.
El disidente ha señalado que mantendrá su huelga “hasta las últimas consecuencias” de ser necesario. Él asegura que el pasado 20 de julio fue torturado por funcionarios de la policía junto a un grupo de militantes del Foro Antitotalitario Unido (FANTU), que lidera.
“Sin llevar carteles, ni repartir propaganda, ni gritar, salí esposado a la espalda, recibí una golpiza en la que me fracturaron varias costillas y me sacaron la lengua a la fuerza. Quería preguntar por el caso de un detenido”, señaló.
Desde el comienzo de la protesta, el Premio Sajarov ha sido visitado por funcionarios de las embajadas de España, Estados Unidos y de la Iglesia católica cubana. Hasta los momentos ninguna autoridad del Gobierno cubano ha reaccionado ante la protesta.
En su anterior huelga de 2010, las exigencias del opositor dieron al traste con la liberación del resto de los presos políticos de la Primavera Negra de 2003, así como otros condenados por motivos de disenso con el régimen castrista.
Fuente: Martí Noticias; Diario de Cuba