Tras la crisis política, económica y social que enfrenta el país gobernado por Nicolás Maduro; venezolanos en el exterior piden a hijos de funcionarios chavistas que se pronuncien.
A través de un video protagonizado por jóvenes, la Fundación Venex Curazao se dirigió a los hijos de diputados, ministros y otros funcionarios chavistas para que alcen sus voces ante la situación del país suramericano.
Alfredo Limongi, miembro fundador de la ONG, informó a PanAm Post que el principal objetivo de esta iniciativa es apoyar “al cambio en Venezuela desde las armas que da la comunicación”.
“En nuestro video planteamos en qué creen nuestros hijos, y lanzamos una pregunta a los hijos de los funcionarios del gobierno, de todos los niveles a que nos digan en qué creen ellos”; señaló.
Y es que mucho impacto causó en Venezuela la posición de Yibram Saab, hijo del Defensor del Pueblo, Tarek William Saab.
El joven rompió el silencio y luego de acudir a una marcha opositora, envió un mensaje a su padre “para que reflexione y haga lo correcto”.
Sin embargo, Yibram es una excepción; pues la mayoría de los jóvenes hijos de funcionarios chavistas se han mantenido en silencio ante la crisis que enfrenta el país suramericano; de hecho, muchos de ellos que viven en el exterior han sido víctimas de escrache (intimidación) por no emitir opinión alguna.
Tal es el caso de Lucia Rodríguez, hija de Jorge Rodríguez, alcalde del municipio Libertador de Caracas. Ella está residenciada en Australia y en sus redes sociales se afana en llevar una muy buena vida llena de lujos.
Un grupo de venezolanas la enfrentó mientras paseaba en el país donde reside.
“Por culpa de tu papá hay gente muriéndose […] Llama a tu tía —la actual Canciller venezolana, Delcy Rodríguez—y pregúntale dónde está Leopoldo”, vociferaban.
Rodríguez caminaba en compañía de una mujer y se limitó a ignorar y sonerír ante los reclamos de sus compatriotas. Las ciudadanas insistían en que debía cumplir con su deber como venezolana y ponerse del lado del pueblo.
Esto es parte de la preocupación que sienten los venezolanos en el exterior al saber que quienes se encuentran en su país cada día enfrentan peores condiciones de vida; y ante esto, el chavismo en Venezuela y el mundo, hace caso omiso.