El petróleo arrancó esta semana con su precio más alto desde noviembre de 2018. Sin embargo, Venezuela, el país con las mayores reservas de crudo en el mundo, se beneficiará poco o nada de este incremento. Ya no es un país productor.
Tras el endurecimiento de las sanciones estadounidenses a Irán, el precio del petróleo subió a 73,75 dólares el barril, con un aumento del 3 %, pero Venezuela, que ya no produce y cada vez se le complica más la exportación de crudo, verá pasar este nuevo “boom petrolero” tras la ruina de la estatal petrolera PDVSA.
El precio del petróleo arrancó el día en alza. Cabe esperar que siga subiendo tras el endurecimiento de las sanciones estadounidenses a Irán. Para Venezuela significa poco o nada, tras la ruina de la industria petrolera.
— Alejandro Armas (@AAAD25) April 22, 2019
Estados Unidos eliminará en mayo todas las exenciones garantizadas a ocho países, que les permitían comprar crudo iraní sin sufrir sanciones, dicha decisión impulsó los precios del barril a su máximo anual. Mientras que en Venezuela, bajo Maduro la producción petrolera disminuyó a mínimos históricos, en una estimación de 600 000 barriles diarios.
Según la Organización de e Países Exportadores de Petróleo (OPEP), Venezuela es el país con las mayores reservas probadas de crudo en el mundo, con 296 501 millones de barriles. No obstante, paradójicamente, ya el crudo y su comercialización no es un negocio rentable para el país suramericano tras la brutal desidia del socialismo.
El economista José Toro Hardy, quien fue miembro principal del directorio de PDVSA antes de la llegada de Hugo Chávez al poder, explicó al PanAm Post que ese aumento del precio no beneficiará a Venezuela, debido a que el país suramericano se ha convertido en importador de petróleo.
“Estamos importando grandes cantidades de petróleo, gasolina y nafta; de manera que el aumento del precio también tendrá un costo altísimo para Venezuela porque lo que nosotros exportamos es cada vez menos”, señaló.
Explicó que de lo que poco que está produciendo PDVSA, Venezuela destina la mayoría al consumo interno y al pago de las deudas adquiridas a China y Rusia.
Además de que Venezuela que no percibirá los “beneficios” de este aumento petrolero, tampoco podría hacerlo por las sanciones internacionales que impiden a empresas extranjeras mantener relaciones comerciales con PDVSA; medidas tomadas principalmente por Estados Unidos para presionar la caída de Maduro.
Rusia rescata a Maduro
La agencia de noticias Reuters reveló que para obtener dinero en efectivo y evadir las sanciones estadounidenses, Maduro estaría usando a la estatal rusa Rosneft.
La dictadura en Venezuela estaría canalizando el poco flujo de efectivo de las ventas de petróleo a través de Rosneft. Al parecer PDVSA comenzó a pasarle las facturas de sus ventas de petróleo.
El esquema descubierto por Reuters revela que la petrolera rusa “paga a PDVSA inmediatamente con un descuento sobre el precio de venta, y cobra el monto total más tarde al comprador”.
Explica que PDVSA ha pedido a sus principales compradores, como Reliance Industries Ltd de India, que pague a Rosneft por el petróleo venezolano; así lo confirmó una fuente a Reuters.
“Han realizado pagos a compañías rusas y chinas por el petróleo venezolano”, y agregó que los desembolsos se deducían del dinero que Venezuela debía a esos países, pero no proporcionó más detalles.