La posesión de Citgo por parte de Venezuela pende de un hilo. El próximo 28 de octubre es la fecha límite para pagar 914 millones de dólares entre capital e intereses a los tenedores del bono PDVSA 2020. De no hacerlo, los acreedores podrán tomar el control de la petrolera y el país suramericano perdería su mayor activo en el exterior.
Citgo es una empresa con 4 900 estaciones de gasolina y una red de tres refinerías ubicadas en Luisiana, Illinois y Texas. La compañía refina setecientos cuarenta y nueve mil barriles de crudo diarios.
Por décadas fue un instrumento estratégico que le sirvió a la tiranía para poner petróleo venezolano en el mercado estadounidense y recibir dinero en efectivo. Además, es uno de los pocos activos extranjeros de la nación que ha sobrevivido a la catástrofe causada por el chavismo y la “revolución bolivariana”.
Lo más importante a resaltar es que hasta 2018 Citgo estuvo en manos de los regímenes de Hugo Chávez y Nicolás Maduro. Sobre ellos recae la responsabilidad de que Venezuela pueda perder esta compañía, pues irresponsablemente hipotecaron al país y dieron en garantía el mayor activo que tiene el país.
Luego de que el presidente (e) Juan Guaidó asumiera el cargo, Estados Unidos lo ayudó a asumir el control de la refinería. Sin embargo, la empresa ya tenía millones de dólares en deudas comprometidas y casos abiertos en tribunales por parte de acreedores o empresas víctimas de las expropiaciones encabezadas por Chávez. Cuando la oposición asumió el poder de Citgo, Venezuela ya corría el riesgo de perderla.
El incumplimiento de un pago de emisión de bonos de PDVSA, por 913 millones de dólares, podría ser la causa por la cual Venezuela pierda esta compañía. Si el país petrolero cae en default, los tenedores de bonos tendrían derecho a embargar el 50.1 % de las acciones que Maduro puso como garantía. El 49.9 % restante también se puso como garantía en un préstamo de 1.5 mil millones que recibió el régimen de la estatal rusa Rosneft.
La oposición venezolana considera que por muchos años los tenedores de bonos financiaron al régimen a pesar de que la legítima Asamblea Nacional les advirtió que la transacción era ilegal en el momento del lanzamiento de la emisión, en 2016. Sin embargo, en abril la misma Asamblea autorizó un desembolso por 71 millones de dólares para evitar perder el control de Citgo.
Existe un choque de opiniones sobre si pagar o no esta deuda. Especialistas aseguran que si la deuda es ilegal, no tendría sentido que el Parlamento aprobara el pago, sobre todo cuando la pérdida de Citgo es inminente. En dicha oportunidad los asesores de Guaidó consideraron que si se hacía el pago se protegería, aunque fuera momentáneamente, la posesión Citgo.
Paradójicamente este martes 15 de octubre la misma Asamblea Nacional que aprobó pagar el bono en abril, decidió rechazar “la ilegal deuda de los bonos Pdvsa 2020”.
Que @jguaido y la junta directiva de CITGO por el designada me expliquen ¿cómo después de pagar millones en intereses a los tenedores de los bonos PDVSA 2020, ahora tratan de decirnos que es deuda ilegal? ¿Es ilegal ahora, o siempre lo fue? pic.twitter.com/nsxqJhSPfv
— PLPR (@soypedropedrosa) October 15, 2019
Ricardo Hausmann, reconocido como el mejor economista de Venezuela y asesor de Guaidó, afirmó que en abril “se pagó bajo protesta para evitar que nos quiten Citgo”, y argumentó que para esa oportunidad el Gobierno interino “no estaba preparado para ir a un juicio”. Asegura que “hoy sí lo están”. Todo indica entonces que el Gobierno Guaidó se prepara para acudir a los tribunales en Estados Unidos.
Por qué pagamos los intereses del PDVSA 2020 en abril y ahora argumentamos la ilegalidad del bono? En abril pagamos bajo protesta para evitar que nos quiten CITGO porque no estábamos preparados para ir a juicio. Hoy si lo estamos.
— Ricardo Hausmann (@ricardo_hausman) October 15, 2019
Los economistas Miguel Ángel Santos y Frank Muci señalan que “pagar los bonos tal y como fueron contraídos, sería hacerse cómplice de unos y otros”. Aseguran, además, que “pagar sin reparos a los tenedores del PDVSA 2020 atenta contra las posibilidades de que Venezuela pueda salir de las sombras y superar la catástrofe en que la ha sumido el chavismo. La recuperación pasa por darle prioridad a la atención de la crisis humanitaria y sentar las bases para la reconstrucción de la economía”.
Las alternativas de Guaidó
La situación es tan crítica que el viernes 11 de octubre el Congreso de Estados Unidos hizo un llamado al presidente Donald Trump “para proteger a Citgo” de las deudas originadas por los regímenes de Chávez y Maduro en Venezuela.
Los especialistas explican que una posibilidad es que el Gobierno de Estados Unidos decida hacer uso de su autoridad ejecutiva para impedir a los tenedores del PDVSA 2020 tomar el control de Citgo.
En este texto @frankmuci y yo argumentamos que el pago del PDVSA 2020 es un espejo de los conflictos de intereses que permean la sociedad, y que #Venezuela se juega de aquí al 28/10 algo que va mucho más allá del valor de CITGO. https://t.co/dUZ7GSZ5lM
— Miguel Angel Santos (@miguelsantos12) October 15, 2019
Una segunda posibilidad requiere de una intervención del Departamento del Tesoro, la cual necesitaría que derogue la Licencia 5, donde se permite a los tenedores del PDVSA 2020 tomar el control de Citgo ante un default. Con una derogación, el Tesoro podría proteger Citgo.
Otra opción que tiene el Gobierno Guaidó es iniciar un litigio que cuestione la legalidad del bono PDVSA 2020. Explican Santos y Muci que “este proceso requiere llevar el caso a una corte de Nueva York, buscando en principio una suspensión temporal de las posibles acciones contra Citgo hasta tanto no se resuelva el caso”.
¿Qué significa perder Citgo?
Sin Citgo, Venezuela perdería la capacidad de distribuir crudo venezolano en Estados Unidos. Sin embargo, tras las sanciones emitidas por el Gobierno Trump contra la tiranía, ese país ha reducido sus compras a Venezuela.
En 2016 se conoció que Maduro hipotecó en secreto la refinería Citgo a Rusia por un millonario préstamo. El régimen venezolano le habría entregado el 49,99 % de las acciones a cambio de un préstamo de 1,5 billones de dólares.
La petrolera venezolana PDVSA adjudicó parte del control de la refinería en Estados Unidos a la estatal rusa Rosneft, según un documento que dio a conocer el Latin American Herald Tribune, donde esta admite que controla el 49,99 % de las acciones de Citgo.
Si Citgo o PDVSA incumplieran con el pago del préstamo, Rosneft podría terminar siendo dueña de importantes refinerías de petróleo y oleoductos en Estados Unidos.
Ante un posible default por parte del régimen de Maduro, el Gobierno de Estados Unidos decidió permitir que los tenedores de bonos de PDVSA 2020 puedan reclamar el cobro de su garantía en caso de que Venezuela incumpla con los pagos. Con ello podrían apropiarse de acciones de Citgo.
Conocer cuánto vale Citgo es una discusión constante entre los economistas, pero, según estimaciones, si Venezuela hoy decidiera venderla para pagar sus deudas, no recibiría más de cuatro mil millones de dólares, de los cuales la mitad es de Rosneft y la otra mitad para pagar todas las deudas pendientes.