Después de regresar de su gira por cinco países de Latinoamérica, Juan Guaidó inició ayer 5 de marzo conversaciones con los líderes sindicales venezolanos para preparar una huelga “escalonada” de empleados públicos que empezaría el próximo sábado 9 de marzo.
El presidente interino de Venezuela se reunió con voceros de grupos de jubilados, docentes, trabajadores de la salud, delegados de la compañía estatal de telefonía, de la Cancillería, del metro, e incluso trabajadores del Consejo Nacional Electoral. Además, a partir de mañana la Asamblea Nacional empezará una serie de citas con cerca de 600 sindicatos más para definir las acciones que vendrán desde las centrales de empleados.
Según las declaraciones conocidas después de la reunión, todo fue una iniciativa propuesta por los mismos empleados en reclamo por el “irrespeto a sus derechos laborales y por la pobreza que viven todos”. Ante el anuncio del paro hecho por Guaidó, Nicolás Maduro dijo que se trata de una “minoría enloquecida que solo busca impulsar la desestabilización de su mandato”, aseguró que los derrotará y convocó a sus “simpatizantes” a participar en manifestaciones el sábado, día de movilizaciones de la oposición y cuando se espera empiece la huelga.
Lograr un paro generalizado en Venezuela es muy importante, el único dictador que ha sufrido Colombia, el general Rojas Pinilla, fue derrocado después de un paro generalizado que duró una semana. Bancos, grandes industrias, sector comercial, universidades y hasta las tiendas de esquina cerraron, el país se paralizó y logró la salida del dictador. Los hechos hoy en Venezuela son por supuesto diferentes a los de la Colombia de 1957, sin embargo, que con una semana de paro se haya logrado sacar a un dictador, dice mucho de lo que se puede lograr en Venezuela.
En la Noticia del Día hablamos del paro que planean los empleados públicos en Venezuela y de la experiencia de Colombia al respecto.
Después de regresar de su gira por cinco países de Latinoamérica, Juan Guaidó inició ayer 5 de marzo conversaciones con los líderes sindicales venezolanos para preparar una huelga “escalonada” de empleados públicos que empezaría el próximo sábado 9 de marzo.
El presidente interino de Venezuela se reunió con voceros de grupos de jubilados, docentes, trabajadores de la salud, delegados de la compañía estatal de telefonía, de la Cancillería, del metro, e incluso trabajadores del Consejo Nacional Electoral. Además, a partir de mañana la Asamblea Nacional empezará una serie de citas con cerca de 600 sindicatos más para definir las acciones que vendrán desde las centrales de empleados.
Según las declaraciones conocidas después de la reunión, todo fue una iniciativa propuesta por los mismos empleados en reclamo por el “irrespeto a sus derechos laborales y por la pobreza que viven todos”. Ante el anuncio del paro hecho por Guaidó, Nicolás Maduro dijo que se trata de una “minoría enloquecida que solo busca impulsar la desestabilización de su mandato”, aseguró que los derrotará y convocó a sus “simpatizantes” a participar en manifestaciones el sábado, día de movilizaciones de la oposición y cuando se espera empiece la huelga.
Lograr un paro generalizado en Venezuela es muy importante, el único dictador que ha sufrido Colombia, el general Rojas Pinilla, fue derrocado después de un paro generalizado que duró una semana. Bancos, grandes industrias, sector comercial, universidades y hasta las tiendas de esquina cerraron, el país se paralizó y logró la salida del dictador. Los hechos hoy en Venezuela son por supuesto diferentes a los de la Colombia de 1957, sin embargo, que con una semana de paro se haya logrado sacar a un dictador, dice mucho de lo que se puede lograr en Venezuela.
En la Noticia del Día hablamos del paro que planean los empleados públicos en Venezuela y de la experiencia de Colombia al respecto.