La creciente crisis que vive la implementación del proceso de paz en Colombia se ve amenazada por la fuerte presencia de disidencias de las FARC que ponen en peligro lo acordado en La Habana, Cuba.
Esta vez las cuentas hechas por el Gobierno colombiano no reflejan en realidad el número de disidentes que se encuentran refugiados a lo largo del país, que de acuerdo con diferentes investigaciones también ejercen presencia en Venezuela y Ecuador con el fin de copar territorios estratégicos que fueron abandonados por FARC.
El Gobierno colombiano realizó una “exhaustiva” revisión de lo que se ha implementado hasta ahora, en el que el presidente Juan Manuel Santos entregó un “balance positivo” y determinó que el número de disidentes de las FARC es del siete por ciento del número de desmovilizados, es decir, una cifra “menor” a otras negociaciones de paz en el mundo.
Según el mandatario, con base a reportes de las Fuerzas Armadas, los disidentes llegarían a sumar 1.200 integrantes, pero que la mayoría de estos son a raíz de “reclutamiento forzoso”. “Que no nos vengan a decir ahora los detractores del proceso que la implementación de los acuerdos de paz está fracasando”, expresó Santos.
¿Esta cifra si concuerda?
De acuerdo con varios observatorios del conflicto en Colombia, la cifra revelada por el Gobierno colombiano deja a un lado a un buen número de disidentes del grupo guerrillero.
El trabajo de campo realizado por la Fundación Ideas para la Paz (FIP) revela que el número de disidentes en el país seria entre 1.200 – 1.500 hombres agrupados en entre 16 y 18 frentes disidentes.
La cifra entregada por Santos tiene cierta similitud que la anteriormente revelada por el vicepresidente Óscar Naranjo, la única diferencia entre ambas es que la de Santos creció en un punto.
“El 6% y solo el 6% del universo de las FARC se fue a las disidencias. Cuando comparamos ese porcentaje es relativamente bajo porque en otros casos en Colombia ha sido del 18 al 25%. Sin embargo, ese 6% no es menor. Hoy son objeto de persecución”, dijo Naranjo, citado en el informe de la FIP.
Para el analista en defensa y seguridad, Jhon Marulanda, la cifra entregada por el Gobierno colombiano -que aumenta- no refleja la totalidad del pie de fuerza de los disidentes en el territorio.
“Las disidencias están en un 15% aproximadamente, y creciendo. Este número no incluye desertores, pero si los que han copado diferentes territorios a través del fenómeno de cambio de brazalete”, indicó.
Cabe destacar que ni el gobierno ni las FARC sabían con exactitud cuántos integrantes tenían antes del preagrupamiento, en diciembre de 2016.
Razones para entrar en disidencia durante del proceso
Las diferentes experiencias internacionales en las que se han llevado procesos de paz con grupos insurgentes indican que el punto donde ocurre mayor deserción es en la etapa de reincorporación. Los motivos más comunes serian tres:
- Desacuerdos internos con lo que se estaba negociando: este factor refleja una fractura al nivel de la organización en que las bases guerrilleras no están de acuerdo con lo que negocia el mando central, razón por la cual muchos deciden no seguir el proceso y continuar en la insurgencia.
- Temor a los efectos que pudieran tener los marcos de justicia: sobre este punto, los guerrilleros no estarían muy convencidos de los acuerdos a nivel de justicia. Creen que el marco de justicia por el cual se rige su desmovilización no contempla garantías a nivel penal.
- Falta de garantías de seguridad: muchos de los exguerrilleros señalan que el Gobierno no brinda una cobertura plena en materia de seguridad, pilar del proceso de paz.
¿Dónde están ubicados?
Se ha estimado que las disidencias de las FARC en Colombia se encuentran ubicados en el Occidente, particularmente en la frontera con Ecuador. En la zona del pacifico nariñense; Nariño, Tumaco y Cauca. Al suroccidente, se han alimentado estructuras criminales preexistentes como ELN y Clan del Golfo. Al suroriente, Meta, Guaviare y Vaupés, zona muy importante de las FARC en el pasado ya que fue su zona estratégica.
¿Quiénes son sus líderes?
Anteriormente era común escuchar algún alias de los hombres que conformaban el Secretariado de las FARC (Timochenko, Iván Márquez, Jesús Santrich); ahora la nueva generación de narcotraficantes y guerrilleros de la disidencia de las FARC es compuesta por anteriores mandos medios de esa guerrilla.
Alias “Gentil Duarte” (Frente 7) se mueve en Meta, Guaviare y Caquetá.
Alias “Guacho” (Frente Oliver Sinisterra) se mueve en Nariño, Esmeraldas, Ecuador.
Alias “Iván Mordisco” (Frente 1) se mueve en Guaviare, Vaupés y Guainía.
Alias “Julián Chollo” o “John” 40 se mueve en Guainía y Venezuela.
Alias “Giovanny Chuspas” (Frente 16) se mueve en Puerto Gaitán, Meta.
A pesar de haberse desmovilizado la guerrilla de las FARC en Colombia, estas disidencias representan un futuro turbio para la consolidación del proyecto político y para la paz en el país. Pues ya se registran impactos negativos a un año y medio de haberse suscrito el acuerdo, reflejado en un aumento de la violencia producto de las disputas entre distintas organizaciones, muchas de ellas por la economía criminal, narcotráfico y minería ilegal.