Pese a que el expresidente de Colombia, Juan Manuel Santos, se ha mantenido aislado de la política nacional, el fantasma de Odebrecht sigue latente. El Consejo Nacional Electoral (CNE) citó al exmandatario a presentar una versión libre por los hechos relacionados con la financiación de su campaña en la segunda vuelta presidencial para el año 2014.
A diferencia de otros países, donde el dinero de sobornos entregados por Odebrecht para el favorecimiento en obras de infraestructura llegó de forma directa a los candidatos presidenciales, en Colombia, según lo manifestó el excongresista del Partido de la U, Otto Bula, quien participó en la red de sobornos de la multinacional brasileña, la ruta del dinero se dio de forma diferente. Por esta razón, con el fin de indagar la forma en que entraron estos dineros a la Campaña Santos 2014, el CNE abrió una indagación preliminar contra el expresidente por motivo “de la compulsa de copias efectuada por la Fiscalía General, por la presunta infracción al régimen de financiación de campañas”.
Cabe destacar que esta investigación se basa en la declaración que rindió el empresario Andrés Sanmiguel Castaño el pasado 18 de junio de 2018.
A través de la empresa Gistic Logistic Soluciones Integrales, Sanmiguel fraguó el ingreso de dineros ilícitos de Odebrecht a la campaña de reelección presidencial de Santos en 2014. Dineros que llegaron directamente de Consol, la empresa que creó Odebrecht y Episol, de Corficolombiana, para llevar a cabo las obras de la Ruta del Sol 2.
Gistic Logistic Soluciones Integrales entregó 3 850 millones de pesos a la campaña Santos Presidente (casi dos millones de dólares para aquel año), dineros que fueron repartidos entre dirigentes del Partido Liberal, incluido Simón Gaviria, hijo de César Gaviria.
La apertura de la investigación se da, según lo informado por el CNE, “dentro del expediente 3860-19, con el fin de establecer la existencia de nuevos hechos, que puedan ser objeto de investigación por parte de la corporación”. Además de Santos, fueron citados Roberto Prieto, gerente de la campaña; Araceli Rojas, auditora, y al representante legal del Partido de la U en 2014.
Precisamente, en 2010 Odebrecht pagó una factura por 400 000 dólares en afiches para la campaña presidencial de Santos, hecho confesado por Roberto Prieto, quien fue gerente de la campaña. A pesar de la confesión, la Fiscalía ha archivado dos investigaciones contra las campañas presidenciales de Santos (2010 y 2014) ambas por caducidad. Por su parte, Prieto fue condenado a cinco años por los delitos de interés indebido en la celebración de contratos, tráfico de influencias y falsedad en documento privado por el caso Odebrecht.
Hace poco el exmandatario apareció con una columna en el diario español El País aconsejando al presidente Iván Duque “poner a la paz por encima de los partidos y liderar su construcción para recuperar la gobernabilidad que ha perdido de manera prematura”.
Sin duda, la bandera del expresidente Santos ha sido la paz, a raíz del proceso de negociación que mantuvo con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Sin embargo, esta investigación también pretende aclarar si parte de los sobornos de la multinacional Odebrecht estaban destinados no solo a la reelección presidencial, sino también a la publicidad del proceso de negociación entre Santos y la guerrilla.