La Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) volvió a reunirse con el presidente Daniel Ortega en otro intento por retomar el diálogo nacional que ayudaría a solucionar la crisis que atraviesa el país. Sin embargo, los obispos se quedaron de nuevo esperando por respuestas concretas de parte del mandatario, aunque esta vez, con la promesa de que en unos días dará una respuesta.
Según comentó el presidente de la CEN y arzobispo metropolitano, Leopoldo Brenes, en la reunión que se llevó a cabo el pasado jueves 7 de junio se presentó una propuesta de “democratización” al Gobierno basada en los requerimientos de la mayoría de la población.
La intención de los obispos es que esta vez el presidente evalúe la propuesta y responda formalmente la factibilidad de continuar con el diálogo nacional” que giraría entorno a la proposición ya entregada por la Iglesia.
Esto, para no repetir lo ocurrido a mediados de mayo cuando se inició la mesa de negociación y se suspendió poco después, porque el Gobierno no estaba dispuesto a ceder en la propuesta de los sectores civiles.
En esa ocasión, la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia que aglutina al sector privado, sociedad civil, estudiantes y campesinos del país, propuso adelantar las elecciones como una opción constitucional para que el pueblo sea el que decida democráticamente si poner fin al autoritarismo del Gobierno actual; sin embargo, el régimen se negó a discutir lo que considera una “ruta para un golpe de Estado”.
Mientras la ruta constitucional y pacífica hacia la democratización de Nicaragua sea vista por el gobierno como golpe de estado y ni siquiera deseen hablar de ello, será imposible algún diálogo para poder superar la crisis política que sufre el país.
— Silvio José Báez (@silviojbaez) May 24, 2018
Aunque no se tienen detalles de la propusta entregada a Ortega durante el pasado encuentro, el monseñor Silvio José Báez, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua y miembro de la comisión mediadora de la CEN en el diálogo, aseguró que la propuesta entregada es “prácticamente” la misma agenda que se ha venido planteando. Y es que para llevar a cabo un verdadero diálogo será escencial que la Conferencia Episcopal haya planteado un camino para poner fin a este Gobierno, ya que esa es precisamente la principal exigencia de la sociedad.
En una declaración a la prensa, Brenes afirmó que solo queda esperar la respuesta por escrito del mandatario que prometió para dentro de “un par de días”.
Ortega “nos pidió un tiempo de reflexión para darnos una respuesta”, dijo el monseñor José Báez, señalando que dependiendo de la respuesta del presidente se decidirá si continua o no el diálogo.
La frase del comunicado de hoy de los obispos: «esperamos su respuesta por escrito lo más pronto posible», muestra que no hay tiempo que perder y que a todos nos urge una solución para el país. Y escrita para que quede testimonio. Que sea pacífica depende sólo de una persona.
— Silvio José Báez (@silviojbaez) June 8, 2018
Mientras tanto, las protestas en Nicaragua continúan con angustia y desesperación. Cada día son más los muertos y heridos confirmados y ya la cifra de los afectados por la violencia del régimen ha batido récord.
De acuerdo a las últimas cifras publicadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ya hay 127 fallecidos y más de 1200 heridos, pero a esos números habría que agregarle al menos otros cuatro muertos más confirmados por la BBC y todo eso en tan solo 50 días de protestas.
El número registrado de fallecidos en Nicaragua supera incluso al número de muertos que tuvo Venezuela (un país seis veces más grande) durante el mismo tiempo de protestas del año pasado (de abril a junio), en que también se enfrentaron a una masacre por parte de las fuerzas de choque de ese país.
Considerando el tamaño de la población, 131 muertos en #Nicaragua equivalen a 1.330 en Reino Unido, 6.531 en EE.UU., 28.292 en China o 647 en Venezuela. En 50 días! https://t.co/IvPSmFomaa
— Arturo Wallace (@bbc_wallace) June 7, 2018